La banca italiana sigue preocupando y bastante a los mercados y a los inversores, aunque de momento los máximos históricos de Wall Street hacen que los ánimos se mantengan altos y Europa también suba.
Si bien es cierto que los problemas de la banca italiana no son nuevos, es una historia que tiene su origen atrás en el tiempo, también lo es que amenaza con afectar de lleno al sistema bancario del continente, el efecto contagio no es una utopía y las economías portuguesas y españolas serían las más damnificadas en ese sentido.
Fíjense que los bancos italianos tienen unos 360.000 millones en activos tóxicos, de los que 210.000 son muy delicados. Hace tres meses Italia anunció la creación de un banco malo con una dotación de 5.000-6.000 millones de euros de cara a hacer frente a la elevada morosidad, pero aún los efectos esperados se hacen de rogar.
Como ejemplos, tenemos Unicredit (MI:CRDI) que ha perdido casi el 60% de su valor en Bolsa desde el inicio del año, o Monte dei Paschi (MI:BMPS) di Siena que marcó mínimos históricos.
El BCE es consciente del problema y reconoce que los bancos son importantes dentro del contexto de una economía muy bancarizada, por lo que estaba dispuesto a que Matteo Renzi inyecte dinero público a las entidades italianas.
Lo que sucede es que es la Comisión Europea la que debe aprobar una actuación de este tipo y claro, Italia se las verá frente a frente con Alemania que se opone frontalmente, ya que consideran que cualquier rescate se debe articular a través de Bruselas, como ya sucedió en su momento con España. Esto implicaría que Italia tendría que cumplir unas obligaciones que no son precisamente del agrado del Gobierno italiano.
Lo que es evidente es que la banca italiana necesita ayuda y urgente. El problema de los activos no productivos es bastante acuciante y el riesgo de que se produzca un contagio entre el resto del sector es bastante real.
Por el momento los mercados confían en que Mario Draghi sabrá controlar el problema, pero es importante que ustedes conozcan la realidad del tema en cuestión.