Como se esperaba, la Fed dejó sin cambios los tipos de interés en un rango del 0,25 al 0,5% en la reunión de la víspera.
El comunicado oficial, así como la conferencia de prensa posterior a cargo de la titular de la entidad, Janet Yellen, fue sólido y sin sobresaltos. Habló de un crecimiento muy moderado de la economía, redujo sus pronósticos de PBI para el año en curso, y elogió con énfasis al mercado laboral.
Las novedades a considerar esta vez pasaron por dos cuestiones: Yellen habló de un alza de tipos durante este año, más allá de que la Fed sigue paso a paso las cifras que se van publicando. De este modo, los mercados estarán especialmente pendientes de los datos de empleo, dado que la inflación y las ventas minoristas difícilmente crezcan con fuerza, incluyendo las ventas del "viernes negro" que se avecina.
Si la creación de empleo de septiembre, octubre y noviembre acompañan con una cifra cercana a los 200.000 puesto de trabajo, pues sería de esperar novedades con la tasa de interés en la reunión de diciembre. ¿Antes? imposible. Queda la reunión de octubre, días antes de las elecciones, y la Fed no querrá embarrar el camino de la contienda con un día negro en las bolsas.
La otra cuestión, que probablemente impidió que los mercados festejen con mayor intensidad, es que tres de los miembros del FOMC se mostraron partidarios de elevar los tipos de interés. De allí es que suena algo más creíble el argumento de que se acerca el momento de tomar acción.
De todos modos, los mercados bursátiles tomaron de buen modo los anuncios, y al cabo de la conferencia de prensa de Yellen comenzaron a castigar al dólar. Las acciones de Wall Street crecieron, lo mismo sucede con las bolsas europeas este jueves, y las monedas principales se fortalecen.
Como viene sucediendo en los últimos tiempos, el yen encabeza el ataque contra el dólar, con un máximo que tocó a primera hora en 100,08. La corrección actual podría extenderse, sin embargo, a la zona de 101,30 en las próximas horas.
El euro, mucho más moderado, volvió a superar 1,12, y actualmente cotiza a 1,1230, con tendencia alcista para el resto del día. No será viable verlo más allá de 1,1270 en la sesión americana, salvo algún dato que impacte contra el dólar, pero sí podría superar dicha cota el viernes.
La libra esterlina, débil en general, se fortalece en el corto plazo, y sus ganancias recién encontrarán resistencia en 1,3130, antes de que se produzca una corrección en su contra.
Para seguir: las peticiones semanales de subsidio por desempleo, a las 8:30, y la presentación del presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, desde las 9:00.