Tras la mini pausa del miércoles, las bolsas volvieron a retroceder. De hecho, cerraron cerca de los mínimos del día lo que indica que seguimos sometidos a la misma presión bajista sin que, por el momento, se aprecie el menor síntoma de agotamiento. Sin embargo, hay que ser conscientes de que el objetivo del proceso correctivo al que se está haciendo referencia últimamente está ya a la vuelta de la esquina.
En este gráfico se analiza la evolución del Eurostoxx contado en base diaria. Tras una apertura en negativo, el índice perforó rápidamente los primeros niveles de soporte de grado menor lo que provocó que se perforase durante la primera hora del día el mínimo de reacción del martes pasado. El resto de la sesión fue bastante lateral y se cerró cerca de mínimos y por debajo del mínimo anterior.
Este comportamiento formó una importante vela bajista que mantiene la presión bajista actual. Sin embargo, se debe ser consciente de la importancia que tiene el nivel de los 2.661 puntos. Ese es el nivel en donde se encuentra el 61,8% de toda la subida desplegada entre 2011 y 2015. Además, si se considera el movimiento bajista iniciado en abril como un gran zigzag, vemos que si restamos la amplitud de la onda A principal (863 puntos) al punto de inicio de la onda C principal (3.524), obtenemos un precio objetivo en el 2.660.
Pese a lo comentado, se debe ser consciente de que los suelos no suelen ser tan fáciles de identificar puesto que las situaciones de pánico que muchas veces originan hacen que los objetivos que se tienen en mente se superen de manera a veces muy agresiva. Pero en lo que sí se debe centrar la atención es en la posible aparición de alguna figura o estructura de suelo en este entorno. Si se da esta circunstancia, su importancia será aún mayor dada la importancia de la zona de soporte comentada.
Por lo tanto, las posiciones cortas que se hayan podido abrir el lunes tras la ruptura del 2.850 deben seguir manteniéndose con la intención de cerrarla entre el 2.670 y el 2.660. A partir de ese momento, se deberá pasar a una posición neutra a la espera de ver si, finalmente, el mencionado soporte ejerce su influencia y propicia la formación de una figura de suelo que de base técnica suficiente como para empezar a abrir posiciones largas de nuevo.
En este gráfico se analiza la evolución del Dax contado en base diaria. Su situación técnica es muy similar a la anterior aunque con algunos matices. El retroceso de Fibonacci que se está a punto de alcanzar (8.678) es el 50% de la subida 2011/2015 y no el 61,8%; Por otro lado, el cálculo del objetivo de la onda C no coincide con el Fibonacci puesto que se sitúa en el 8.380. Por último, entre estos 2 importantes niveles encontramos uno de los máximos/mínimos crecientes principales del proceso alcista principal previo (máximos de primera mitad de 2013 y mínimo de octubre de 2014).
Sin embargo y a pesar de los matices comentados, la importancia de esta zona es similar a la del caso anterior. Sería de esperar, por ello, que alrededor de la zona comentada (8.678 a 8.380) se forme una figura o estructura de suelo que indique el agotamiento del proceso correctivo iniciado en abril lo que permitiría volver a plantearse la construcción de posiciones largas. Pero habrá que esperar la aparición de la misma antes de ‘tirarse a la piscina’.
Por lo tanto, los cortos que se vienen arrastrando desde el lunes deben mantenerse con la intención de recoger beneficios entre el 8.680 y el 8.660. A partir de ahí se deberá pasar a una posición de neutralidad a la espera de tener una base técnica lo suficientemente sólida como para plantearse la apertura de largas de nuevo.
Por último, en este gráfico se analiza la evolución del Ibex contado en base diaria. La situación técnica es similar aunque, de nuevo, con algún matiz. La principal diferencia es que el cálculo del objetivo de la onda C situaba el objetivo en el 7.978, nivel que se perforó marginalmente el martes pero que quedó pulverizado en la sesión del jueves. Sin embargo, hay que tener presente que entre el 7.567 y el 7.490, se encuentra el mínimo de la onda 2 del proceso alcista principal previo desplegado entre 2012 y 2015, zona que debería tener un efecto similar al comentado en los 2 casos anteriores.
Por lo tanto, en este caso no se identificó una señal clara al principio de esta semana que permitiese la apertura de posiciones cortas, con lo que se debe seguir manteniendo una posición neutra a la espera de que, en la zona de soporte comentada, aparezca algún síntoma claro de suelo que permita empezar a plantearse comprar.