Durante la semana pasada se esperaban dos noticias muy relevantes para el mercado: la primera provenía de la zona euro; por parte del Banco Central Europeo (BCE); la segunda, los datos de desempleo de Estados Unidos.
En la jornada del jueves el Banco Central Europeo anunció una bajada en los tipos de interés desde 0,15% a 0,05%; noticia que sorprendió al mercado y llevó al euro a mínimos de más de un año.
Por otro lado, el viernes se dieron a conocer los datos de desempleo en Estados Unidos, y aunque la tasa de desempleo se redujo de 6,2% a 6,1%, el cambio en los puestos de trabajo fue menor a lo esperado, motivo por el cual el mercado no se impactó en gran medida.
Con la caída del EUR/USD, el Índice dólar tomó impulso y continuó con la acelerada tendencia alcista que ha presentado desde hace nueve semanas. En la mesa de dinero especulamos que para esta semana, es posible que este índice haga un retroceso hasta la zona de (82,50-82,90), zona demarcada entre el 23,6 y 38,2 del Fibonacci del último rally; y así continuar con su tendencia alcista. 
Esta semana estará marcada por la incertidumbre, pues con la noticia de la baja en tasas de interés, y los negativos datos en la zona euro, se tiene una gran expectativa del inicio del QE, es decir, una inyección de capital a la economía; con lo que se puede generar una fluidez de capital a los mercados de renta variable, y por ende un positivismo en cuanto a un inicio en la recuperación europea, lo que generaría un alza en los índices europeos.
Esta incertidumbre es posible observarla técnicamente en los índices americanos; en velas semanales, tanto el S&P 500, como el Dow Jones y sobre todo en el Nasdaq, se evidencia un spinning top, que más que una vela de cambio de tendencia, es una vela de incertidumbre, en cuanto al mercado al que fluirá el dinero, dadas las recientes noticias europeas. 
Es posible que los índices americanos durante la semana se muevan dentro de un rango, o una zona de consolidación de la tendencia alcista, el S&P 500 entre la zona de 2013 y de 1995, y el Dow Jones entre la zona de 17020 y de 17149. Zona que se encuentra demarcada entre máximos históricos y un soporte que han estado probando los índices en las últimas cinco semanas. 
En cuanto al mercado de commodities, la opinión de la mesa es que continúen con su tendencia bajista, especialmente el crudo, podría continuar con la tendencia que ha venido presentando en las últimas semanas. Impulsado principalmente por la sobreoferta.
Adicionalmente, esto se ve reforzado por los datos sobre empleo que se dieron a conocer el viernes pasado, pues los inversionistas podrían reconocer esto como una pérdida de impulso en la economía norteamericana y arrastrar el precio del crudo a niveles aún más bajos.
Es posible que los futuros de crudo se muevan esta semana entre la zona del 93.70 y el 90.20, zona demarcada por una resistencia previa, y el nivel 38.2 de un Fibonacci, y un soporte alcanzado a comienzos del presente año. 
Finalmente, esta semana estaremos a la espera de las declaraciones del gobernador del Banco de Inglaterra, Mark Carney, el martes en la madrugada, seguido de datos de producción manufacturera de Inglaterra; que es un indicador líder que podría dar indicios sobre las condiciones de consumo, los niveles de empleo y de ingresos, lo cual podría ser relevante para el mercado, dados los recientes acontecimientos con las declaraciones por parte del presidente del banco central europeo.
Adicionalmente el miércoles tendremos el statement de política monetaria neozelandesa, junto con la tasa de interés oficial, que aunque no se espera un movimiento inmediato; podrían presentarse indicios de cuándo van a mover las tasas de interés, pues en la última declaración se anunció que no podrían mantenerlas tan altas por mucho tiempo.
Por último, el viernes en la mañana se presentarán los datos de ventas minoristas de Estados Unidos, con un esperado de 0,3%, es decir un aumento con respecto al anterior. Este dato representa una proxy del gasto de los consumidores, lo que refleja, junto con los datos de desempleo parte de la situación económica de Estados Unidos.