El CEO de Ripple, Brad Garlinghouse, habló hoy en la DC Tech Week, expresando opiniones críticas sobre las recientes acciones legales de la Comisión de Bolsa y Valores de EE.UU. (SEC) contra Ripple. Destacó las amplias pérdidas de la SEC en su litigio en curso con Ripple y sugirió que una apelación de la SEC podría complicar aún más las cosas.
Garlinghouse se mostró lo suficientemente confiado en la posición de Ripple como para sugerir que la empresa está preparada para llevar la lucha hasta el Tribunal Supremo de EE.UU. si es necesario. Citó casos históricos en los que los reguladores han sido derrotados en el más alto tribunal del país, lo que implica un fuerte precedente que podría funcionar a favor de Ripple.
En su discusión, Garlinghouse trazó paralelismos entre los desafíos legales de Ripple y los que enfrentó Grayscale, donde una opinión judicial criticó a la SEC por su conducta, describiéndola como "arbitraria y caprichosa". Esta crítica se suma a un creciente coro de voces que piden una revisión de la forma en que EE.UU. aborda la regulación de las criptodivisas.
El CEO de Ripple también señaló el marcado contraste entre el enfoque cauteloso de Estados Unidos hacia la criptopolítica y la capacidad de otras naciones para atraer inversiones a través de regulaciones claras y transparentes. Advirtió de que Estados Unidos corre el riesgo de perder su dominio potencial en la floreciente industria de las criptomonedas si continúa por la senda reguladora actual.
A pesar de estos retos, Garlinghouse sigue siendo optimista sobre el futuro de la regulación de la criptomoneda en EE.UU. Cree que en un plazo de diez años, las reformas regulatorias podrían fomentar significativamente el crecimiento de la criptomoneda, beneficiando a la industria y posicionando a EE.UU. como líder en este espacio.
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