Fráncfort (Alemania), 7 abr (EFE).- El economista jefe del Banco Central Europeo (BCE), Peter Praet, dijo hoy que la entidad monetaria podría aplicar más estímulos monetarios en caso necesario para afrontar perturbaciones.
En su intervención en la conferencia "Banco Central Europeo (BCE) y sus observadores", Praet dijo que "si se materializan más impactos adversos, nuestras medidas podrían ser calibradas de nuevo de forma proporcionada a la fuerza del viento en contra pero también teniendo en cuenta los efectos secundarios".
En la conferencia participan varios miembros del comité ejecutivo de la entidad monetaria y el gobernador de Banca d'Italia, Ignazio Visco.
Praet defendió los estímulos monetarios que ha aplicado hasta ahora el BCE, sin considerar las decisiones de marzo, porque "han proporcionado un apoyo significativo a la producción y la inflación".
Sin las medidas de política monetaria del BCE, la inflación hubiera sido negativa en la zona del euro en 2015, según Praet.
En 2016 la inflación hubiera sido, al menos, medio punto porcentual menor de lo que prevemos ahora y alrededor de medio punto porcentual menor en 2017.
El impacto de las medidas de política monetaria en el producto interior bruto (PIB) es también significativo, dijo el economista jefe del BCE.
"Nuestra política monetaria contribuye a incrementar el PIB de la zona del euro alrededor del 1,5 % en el periodo entre 2015 y 2018", dijo Praet.
El BCE publica hoy las actas de su última reunión de política monetaria en marzo, en la que aprobó estímulos monetarios muy agresivos para evitar una deflación.
La entidad bajó en marzo su tasa de interés rectora, el que cobra a los bancos por refinanciarse a una semana, hasta el 0 % y cobra a los bancos un 0,40 % por sus depósitos a un día en la entidad monetaria.
El BCE y los bancos centrales nacionales comenzaron el 9 marzo del año pasado a comprar grandes cantidades de deuda pública y privada de la zona del euro, y en diciembre decidieron adquirir también deuda emitida por administraciones regionales y locales de la zona del euro.
El banco ha comprado el primer año deuda pública y privada por valor de 60.000 millones de euros mensuales y a partir de abril de este año ha aumentado las compras mensuales hasta 80.000 millones de euros.