Por Tom Sims y Rene Wagner
FRÁNCFORT, 22 dic (Reuters) -Los precios de la vivienda en Alemania siguieron cayendo, con un descenso del 10,2% en el tercer trimestre respecto al año anterior, en una nueva señal sombría para el sector inmobiliario de la mayor economía de Europa, según datos publicados el viernes.
Fue el cuarto trimestre consecutivo de descensos y el mayor desde que la oficina de estadísticas de Alemania comenzó a llevar registros en términos interanuales en el año 2000, lo que subraya la mayor crisis inmobiliaria del país en décadas.
"Hasta 2022, hubo una burbuja especulativa de precios en Alemania, una de las mayores de los últimos 50 años", dijo Konstantin Kholodilin, del departamento de macroeconomía del Instituto Alemán de Investigación Económica (DIW).
"Los precios no han dejado de bajar desde entonces. La burbuja ha estallado."
Durante años, el sector inmobiliario en Alemania y el resto de Europa estuvo en auge porque los tipos de interés eran bajos y la demanda fuerte.
Pero una fuerte subida de los tipos y los costes ha puesto fin a la racha, abocando a las promotoras a la insolvencia al agotarse la financiación bancaria y congelarse las operaciones.
El descenso de las viviendas unifamiliares y bifamiliares en las principales ciudades alemanas fue especialmente pronunciado en el tercer trimestre: un 12,7%, mientras que los precios de los apartamentos cayeron un 9,1%.
Otros datos del viernes mostraron que los pedidos del sector de la construcción cayeron un 6,3% desestacionalizado en octubre en comparación con el mes anterior.
La Federación Alemana de la Industria de la Construcción afirmó que el sector de la construcción de viviendas se encaminaba hacia una nueva reducción del empleo.
El gigante inmobiliario austriaco Signa, con una importante presencia en Alemania, se declaró insolvente el mes pasado, la mayor víctima hasta la fecha de la crisis inmobiliaria de la región.
(Información de Tom Sims; editado por Miranda Murray, Toby Chopra y Mark Heinrich; editado en español por Javi West Larrañaga y Jesús Calero)