Berlín, 22 sep (.).- La elevada inflación, la subida de los tipos de interés y la debilidad de la demanda exterior frenan el desarrollo económico, lo cual se ve reflejado también en el mercado laboral alemán, con oportunidades de empleo para los parados tan reducidas como en tiempos de la pandemia del coronavirus.
Así se desprende del pronóstico para 2023 y 2024 del Instituto de Investigación del Mercado Laboral y el Empleo (IAB) publicado hoy, que estima que la cifra de desempleados aumentará este año en 190.000 y el que viene en 60.000.
Al mismo tiempo, el desempleo de larga duración se sitúa notablemente por encima de los niveles anteriores a la pandemia, agrega el comunicado.
En general, los expertos prevén para 2023 una reducción del producto interior bruto (PIB) real del 0,6 % y para 2024 un crecimiento del 1,1 %, y con la recuperación, una caída significativa de la inflación.
"La ralentización económica se ha establecido en Alemania. Esto también se hace notar en el mercado laboral, pero medido con respecto a la debilidad de la economía se mantiene comparativamente bien", según Enzo Weber, responsable del área de investigación "Previsiones y análisis macroeconómicos" del IAB.
El instituto estima, además, que la media de personas con empleo en 2023 superará en 310.000 a la del año anterior, a pesar de la actual ralentización, y prevé para 2024 un nuevo aumento en 160.000 personas.
Según las previsiones, también aumentará el número de personas empleadas sujetas a cotizaciones a la seguridad social, aunque debido al débil desarrollo de la economía y a la escasez de mano de obra, será una subida comparativamente pequeña, en 250.000 personas en 2023, hasta los 34,76 millones de asalariados que cotizan.
Así, en comparación con 2022, el aumento de la ocupación se reduce en más de la mitad.
Con la recuperación económica, la tendencia al alza también volverá a ser más visible, pero al partir de un punto relativamente débil de este año en curso, la previsión para 2024 apunta a un crecimiento de sólo 130.000 personas, hasta los 34,89 millones.
En tanto, para 2023 se prevé un fuerte crecimiento del potencial de mano de obra, en torno a 410.000 personas, y para 2024, de 90.000 más.
"El desarrollo de la economía y del mercado laboral se enfrenta a grandes desafíos en vista de la debilidad coyuntural, las profundas transformaciones y la escasez de mano de obra. Por ello hace falta un programa de transformación integral", declaró Weber.
En concreto, el economista se refirió a fomentar las inversiones, a infraestructuras, al desarrollo de competencias y a políticas de datos, así como a un programa global para garantizar mano de obra cualificada.