Por Leika Kihara
MATSUE, Japón, 7 mar (Reuters) - Junko Nakagawa, miembro del consejo de gobierno del Banco de Japón (BoJ), afirmó que la economía avanza con paso firme hacia la consecución del objetivo de inflación del 2% fijado por el banco central y se mostró convencido de que se están dando las condiciones necesarias para la retirada progresiva de su masivo programa de estímulos.
Las declaraciones llegan en un momento en el que el mayor grupo laboral industrial de Japón declaró que algunos sindicatos habían visto satisfechas en su totalidad sus demandas salariales, lo que aumenta las perspectivas de una subida salarial generalizada que el Banco de Japón estableció como requisito previo para abandonar sus medidas de estímulo.
Todas las miradas están puestas en la comparecencia del gobernador del Banco de Japón, Kazuo Ueda, en el Parlamento el jueves, donde probablemente se le interrogará para obtener pistas sobre cuándo pondrá fin el banco central a su política monetaria de tipos de interés negativos y otras herramientas de estímulo.
Dado que la inflación supera el objetivo del Banco de Japón desde hace más de un año y que aumentan las perspectivas de subidas salariales sostenidas, muchos agentes del mercado esperan que el banco central abandone los tipos de interés negativos este mes o el próximo.
En un discurso ante empresarios en la ciudad de Matsue, en el suroeste de Japón, Nakagawa afirmó que la creciente escasez de mano de obra en el país estaba impulsando a más empresas a reanudar su práctica de aumentar los salarios anualmente.
"Podemos afirmar que las perspectivas de que la economía alcance un ciclo positivo de inflación (al alza) y salarios están a la vista", afirmó Nakagawa en su discurso.
"Hay claros signos de cambio en la forma en que las empresas fijan los salarios. Japón avanza con paso firme hacia la consecución sostenible y estable de nuestro objetivo de inflación del 2%", afirmó.
Las declaraciones se producen tras las de Hajime Takata (TYO:7312), otro miembro del consejo de gobierno del Banco de Japón, que la semana pasada afirmó que Japón veía por fin perspectivas de poder alcanzar de forma duradera el objetivo de inflación del 2% fijado por el banco.
A pesar de los recientes signos de debilidad de la economía, los dirigentes monetarios del BoJ han señalado su intención de seguir adelante con su plan de reducir los estímulos, incluido el gobernador Ueda, que la semana pasada ofreció una visión optimista de las perspectivas económicas de Japón.
El gobernador Ueda ha afirmado que el resultado de las negociaciones salariales anuales de primavera de este año será clave para saber en cuánto tiempo podrá el BoJ eliminar gradualmente las medidas de relajación monetaria.
(Reporte de Leika Kihara; Reportaje adicional de Tetsushi Kajimoto; editado en español por José Muñoz)