Berlín, 13 ene (.).- El ministro alemán de Economía, Robert Habeck, expresó hoy su satisfacción por los datos relativos al producto interior bruto (PIB), que creció un 1,9 % en 2022, y que hacen esperar que la ralentización de la economía en el semestre invernal sea más leve de lo esperado.
"Gracias a una actuación decidida el año pasado hemos conseguido hacer manejable la crisis. Hemos elaborado paquetes legislativos en poco tiempo, hemos movilizado grandes cantidades de dinero para apoyar la economía y aliviar la carga de los consumidores. La inflación sigue siendo alta, pero últimamente se ha ralentizado notablemente", destacó.
Según el ministro, a partir de los datos disponibles, es posible pronosticar que "la desaceleración económica del semestre invernal será más leve y breve de lo previsto".
"Este país demuestra así de lo que es capaz. Este año avanzaremos con la misma decisión para seguir siendo un lugar fuerte y competitivo para hacer negocios", agregó.
El comunicado del Ministerio de Economía destaca que la economía alemana dio una muestra satisfactoria de resistencia el año pasado y creció a pesar de la guerra en Ucrania, los cuellos de botella en las cadenas de suministro y la crisis de los precios de la energía.
Esta evolución positiva se debe a los efectos de recuperación tras la pandemia del coronavirus y una gradual mejora en lo que respecta a los problemas en las cadenas de suministro, señala, y destaca que sobre todo el consumo privado y las inversiones impulsaron el crecimiento.
No obstante, aunque cada vez haya más indicios de que la desaceleración económica en el semestre invernal será más leve de lo previsto, "es probable que los elevados aumentos de precios que llegan cada vez más a los consumidores sigan lastrando el desarrollo económico en Alemania a principios de 2023".
Además, la incertidumbre en cuanto a las perspectivas económicas se traduce actualmente todavía en una contención en lo que respecta a las inversiones, señala el comunicado.
Según las encuestas del Instituto de Investigación Económica (Ifo), la confianza empresarial mejoró notablemente en diciembre y todos los sectores se muestran más confiados que antes, un indicio más de que "la recesión podría no materializarse en el semestre de invierno ".
La producción industrial se estabilizó en noviembre tras una débil entrada en el cuarto trimestre. La demanda en el sector manufacturero registró un fuerte retroceso en noviembre, que estuvo muy marcado por la falta de grandes pedidos del extranjero en la construcción de otros vehículos.
Así, la industria alemana atraviesa un invierno difícil, aunque las expectativas de negocio han mejorado recientemente.
En tanto, la confianza del consumidor privado siguió estabilizándose, pero se mantuvo en un nivel bajo.
En diciembre, el índice de precios al consumo (IPC) retrocedió en 1,4 puntos porcentuales hasta el 8,6 %, de manera que la tasa promedio de inflación en 2022 se situó en el 7,9 %.
También a finales de año el mercado laboral siguió dando muestras de solidez.