Málaga, 25 ene (.).- El exconsejero delegado de Bankia (BME:BKIA) José Sevilla se perfila como nuevo presidente no ejecutivo de Unicaja Banco (BME:UNI) entre la terna de aspirantes sobre la que la entidad tiene previsto decidir este viernes en sustitución de Manuel Azuaga, quien presentó su renuncia el 24 de noviembre.
Fuentes financieras han informado a EFE de que Sevilla forma parte de una terna de nombres que está sobre la mesa para decidir el futuro presidente del banco y en la que también están del mismo sector bancario Antonio Román y Ana Bolado, esta exconsejera independiente de Unicaja.
José Sevilla es desde marzo de 2022 consejero independiente de Renta 4 (BME:RTA4) Banco y como número dos de Bankia durante la presidencia de José Ignacio Goirigolzarri fue pieza clave en el saneamiento de la entidad y su posterior integración en CaixaBank (BME:CABK).
La comisión de nombramientos de Unicaja estudió posibles candidatos a la presidencia, tarea que a su vez encargó externamente a una empresa consultora de Recursos Humanos o 'cazatalentos' (head hunter), y el acuerdo que adopte el consejo de administración se someterá al examen del Banco Central Europeo (BCE).
El nuevo presidente debe ser una persona independiente y externa, según ese organismo, para hacer de contrapeso del consejero delegado, Isidro Rubiales, indican las fuentes.
La Fundación Bancaria Unicaja, mayor accionista de Unicaja Banco con un 30,24 % , ha celebrado este jueves una reunión de su patronato, en la que se han abordado cuestiones de carácter ordinario, aunque podría volver a mantener otra este viernes.
Azuaga, de 76 años, renunció tras siete años y medio al frente de Unicaja, en los que lidió con la guerra interna entre los bloques malagueño y asturiano que se desató tras la fusión con Liberbank (BME:LBK) en 2021 y ejercía como presidente no ejecutivo después de dejar en septiembre sus funciones ejecutivas, según lo previsto en la integración.
Presentó su renuncia como presidente y consejero de Unicaja un año antes de finalizar su mandato, lo que llevó al consejo de administración a activar el plan de sucesión para buscar sustituto.
Planteó que, una vez culminada la fusión con Liberbank y finalizado el periodo transitorio previsto en ese proceso, era el momento idóneo para su relevo en la presidencia y poner fin a su larga carrera en Unicaja Banco.
Manuel Azuaga tenía mandato como integrante del consejo de Unicaja hasta 2025, ya que su última reelección como consejero fue en marzo de 2022.
Durante estos últimos años se produjo la guerra interna desatada entre los bloques malagueño y asturiano de la entidad, vinculados con el sector de la Unicaja original y el bando procedente de Liberbank respectivamente.
Estas tensiones derivaron en el cese de Manuel Menéndez, procedente de Liberbank, como consejero delegado y el posterior nombramiento de Rubiales como sustituto.
Azuaga, que accedió a la presidencia de Unicaja en junio de 2016 tras dejar el cargo, después de 25 años, el histórico Braulio Medel, ejercía como presidente no ejecutivo, de acuerdo con lo previsto en la fusión con Liberbank, que fijaba un traspaso de poder por el que él debía desprenderse -antes del 30 de julio- de esas tareas, que pasarían al consejero delegado.
Este banco de origen malagueño vivió en los últimos meses importantes cambios accionariales, en los que el empresario Tomás Olivo, sexto español más rico del país según la revista Forbes, ganó peso en Unicaja al convertirse en el segundo mayor accionista de la entidad, superando el 9 %.
En el reparto del capital de Unicaja le sigue Indumenta Pueri (la familia propietaria del grupo textil malagueño Mayoral), con un 8,54 %.