MADRID, 11 jul (Reuters) - El presidente del Gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, y el líder del conservador Partido Popular (PP), Alberto Núñez Feijóo, mantuvieron el lunes un intenso debate televisivo en directo, previo a las elecciones generales del 23 de julio.
Los dos candidatos se enzarzaron en discusiones sobre diversos temas, desde la economía, la vivienda y las pensiones hasta el medio ambiente, las relaciones internacionales y los derechos de la mujer, interrumpiéndose a menudo, agitando gráficos numéricos, entornando los ojos y gesticulando airadamente.
Aunque ambos candidatos se declararon satisfechos con el resultado, los telespectadores y analistas afirmaron que los planes de Gobierno de los dos partidos quedaron eclipsados por la caótica actuación. Muchos criticaron a los dos presentadores del programa por no haberles puesto freno.
"Se enredaron en las diferencias entre ellos, lo que ha perjudicado a ambos por igual", dijo María José Canel, profesora de Comunicación Política de la Universidad Complutense de Madrid, añadiendo que mientras el veterano Sánchez había estado más "histriónico" de lo previsto, el taciturno Feijóo había actuado mejor de lo que esperaba.
A poco menos de dos semanas para la votación, los sondeos de opinión dan a Feijóo como probable ganador, aunque probablemente necesitaría el apoyo del partido de extrema derecha Vox.
Algunas encuestas, sin embargo, muestran a los socialistas (PSOE) recortando distancias poco más de un mes después de que Sánchez anunciara la convocatoria de elecciones anticipadas tras unos comicios regionales en los que su partido obtuvo unos resultados decepcionantes.
ECONOMÍA "COMO UNA MOTO"
Los candidatos citaron distintas métricas de inflación, crecimiento económico y empleo para pintar de ejemplar o desastrosa la gestión económica del presidente del Gobierno en funciones durante la pandemia de COVID y la guerra de Ucrania.
Sánchez destacó que España es uno de los pocos países europeos que ha situado la inflación por debajo del objetivo del 2% fijado por el Banco Central Europeo para 2023. Una prueba, dijo, de que "vamos en la buena dirección".
Feijóo dijo que la afirmación de Sánchez de que la economía se movía "como una moto... muestra una falta de respeto a los españoles", señalando a la gente que tiene dificultades para pagar su compra semanal.
Ambos candidatos se toparon con un terreno incómodo en sus políticas relacionadas con la mujer.
El Gobierno de izquierdas de Sánchez se vio obligado a pedir disculpas en abril por una laguna en una ley sobre violencia sexual que supuso la reducción o el fin anticipado de la condena de al menos 1.155 delincuentes encarcelados.
El PP de Feijóo ha sellado acuerdos de coalición en varias regiones y ciudades españolas con Vox que incluyen la reformulación de la violencia de género como "violencia intrafamiliar". El propio Feijóo fue recientemente puesto en la picota por decir que un candidato electoral de Vox condenado por violencia de género tuvo un "divorcio duro".
Feijóo le dijo a Sánchez: "Hay violadores en la calle por culpa de usted (...) Hay más de 1.000 machistas violadores que han rebajado sus penas por usted".
Sánchez respondió: "En nuestro país hay un problema con las agresiones sexuales. Un error se corrige, pero un gesto machista no (...) Lo que está haciendo con la ultraderecha es una claudicación ante el machismo."
INCÓMODOS COMPAÑEROS DE CAMA
Ambos se enfrentaron también por los incómodos compañeros de cama que podrían tener que elegir para asegurarse los 176 escaños parlamentarios que necesitarían para gobernar tras las elecciones.
Feijóo subrayó que el PSOE ha recurrido al partido separatista vasco EH Bildu —vinculado a la extinta banda terrorista ETA— para aprobar leyes en el Congreso.
"De pactos usted no puede dar ninguna lección", le dijo a Sánchez, señalando que había pactado con Bildu.
Sánchez respondió recordando comentarios de diputados de Vox de corte machista o que cuestionan el cambio climático y la validez de las vacunas COVID.
"Ustedes lo que han hecho ha sido un intercambio impúdico, obsceno, de derechos por votos", espetó, dejando a Feijóo momentáneamente sin palabras.
José Miguel Contreras, catedrático de Comunicación de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid, afirmó que, al celebrarse el debate "en un momento delicado del proceso electoral", su influencia puede ser "decisiva".
El debate nocturno se emitió simultáneamente en la cadena de derechas Antena 3 y en laSexta, dirigida a un público de izquierdas. Ambas cadenas son propiedad de Atresmedia (BME:A3M).
(Reporte de Belén Carreño y Corina Rodríguez, escrito por Belen Carreno y Aislinn Laing; Editado por Rosalba O'Brien; editado en español por Tomás Cobos)