MADRID (Reuters) - Tras cuatro meses de negociaciones y con el plazo del preconcurso agotado, Abengoa (MC:ABGek) alcanzó el lunes un hito "clave" en sus esfuerzos para esquivar la quiebra, al conseguir que más del 75 por ciento de sus acreedores financieros le concedan tiempo para reestructurar sus deudas, siempre y cuando el juez certifique este acuerdo de espera.
De momento, el juzgado mercantil número 2 de Sevilla admitió a trámite el lunes la solicitud de homologación del acuerdo de espera, o "standstill" según la jerga financiera, garantizando que Abengoa seguirá protegida de sus acreedores mientras decide si da más tiempo a la endeudada empresa sevillana.
Este lunes finalizaba el plazo del preconcurso de acreedores al que se acogió en noviembre la compañía, que necesitaba que al menos el 60 por ciento de sus acreedores apoyase el "standstill" para pedir su homologación judicial.
"La finalidad del presente acuerdo es regular los términos en los que las partes convienen en prorrogar la deuda afectada hasta el 28 de octubre de 2016, para permitir que durante ese periodo (de espera) las partes sigan negociando con vistas a acordar la reestructuración de la deuda financiera del grupo y su recapitalización", reza la providencia del juzgado sevillano divulgada el lunes.
Más temprano, Abengoa había señalado que el acuerdo de espera le permitirá "lograr el 75% de las adhesiones necesarias para obtener el acuerdo final", en alusión al porcentaje de la masa acreedora que necesitará para cerrar el acuerdo de reestructuración que avanzó a mediados de marzo.
La empresa de ingeniería y energías renovables dijo entonces que el plan de reestructuración tenía el refrendo del 40 por ciento de los acreedores financieros, pero para hacerlo extensible a la totalidad del pasivo son necesarias al menos las tres cuartas partes, algo que su actual presidente Antonio Fornieles dijo que esperaba conseguir antes de finales de abril.
Sin embargo, una fuente bancaria dijo que un acuerdo de reestructuración podría tardar meses en ser llevado al juzgado.
"Si el juez concede el aplazamiento, el proceso será continuar desarrollando la documentación legal del preacuerdo alcanzado. Después se someterá a la consideración de los acreedores y se pedirá su voto a favor para presentarlo al juzgado durante los próximos cuatro a seis meses", dijo la fuente.
Además, tendría que ser aprobado por los accionistas de Abengoa.
Un eventual acuerdo reduciría su deuda financiera de 9.395 a 4.923 millones de euros y dotaría a Abengoa de la financiación necesaria para superar la crisis en la que está sumergida el grupo.
Mientras tanto, la compañía sigue sufriendo un estrangulamiento financiero que dificulta su día a día. La semana pasada, en el marco de las conversaciones de reestructuración, un grupo de acreedores inyectó de forma urgente 137 millones de euros con un tipo de interés del 14,5 por ciento.
PIDE PROTECCIÓN CONTRA ACREEDORES EN EEUU
Abengoa también dijo este lunes que solicitará protección contra acreedores en Estados Unidos para sus sociedades en el país, donde una filial de bioenergía ya pidió acogerse a finales de febrero al denominado "Chapter 11".
Además, solicitará acoger a todas las sociedades del grupo a otro capítulo de la ley de quiebras estadounidense (Chapter 15) "con el objetivo de hacer extensiva la protección y homologación del acuerdo en este país".
En Estados Unidos cotiza Atlantica Yield, considerada como la joya de la corona del grupo sevillano, aunque esta tiene su sede en Reino Unido y está sometida a la regulación británica.