Londres, 28 jul (.).- La debilidad de los precios del petróleo ha tenido un impacto en los resultados semestrales de la compañía anglo-holandesa Royal Dutch Shell (LON:RDSb), cuyo beneficio atribuido bajó el 80 % en la primera mitad de 2016 frente al mismo periodo de 2015.
En los seis primeros meses del año, Shell registró un beneficio atribuido de 1.494 millones de euros (1.659 millones de dólares), según informó hoy la empresa en un comunicado.
Tras conocerse sus resultados, las acciones de Shell bajaban el 2,50 % en la Bolsa de Londres y se situaban en 1.992 peniques.
Al igual que BP (LON:BP), los beneficios de Shell se han visto reducidos por la caída de los precios del crudo, puesto que éstos se situaban en el segundo trimestre -abril a junio- a un promedio de 46 dólares el barril, frente a los 62 dólares en que estaban hace un año.
Según la empresa, sus ingresos se colocaron en el primer semestre del año en 96.272 millones de euros (106.969 millones de dólares), lo que significa un descenso del 22,5 % frente al mismo periodo del año anterior.
El consejero delegado de Shell, Ben van Beurden, dijo hoy que su negocio de gas rindió bien pero que "los bajos precios del petróleo aún suponen un desafío importante", por lo que aplica una reducción de los costes para hacer frente a esta situación.
Las compras efectuadas en el primer semestre fueron de 66.356 millones de euros (73.648 millones de dólares), un 26,2 % menos frente al mismo periodo del año pasado.
La petrolera también anunció un dividendo de 0,42 céntimos de euro (0,47 centavos de dólar) por acción ordinaria correspondiente al segundo trimestre del año -abril a junio-.
Shell, que a principios de año completó la adquisición de la petrolera BG Group, aplica un plan de reducción de costes para recortarlos en un 35 % en los próximos cuatro años.
Además, la petrolera espera unos ahorros de 4.054 millones de euros (4.500 millones de dólares) por la fusión con BG, mientras que también espera llevar adelante una venta de activos por valor de 27.000 millones de euros (30.000 millones de dólares) en los próximos dos años.
Shell informó de que ha tenido éxito en sus trabajos de exploración en Omán y Estados Unidos, sobre todo por el descubrimiento de crudo en el pozo Fort Sumter en el golfo de México, cuya estimación de recursos es de 125 millones de barriles.
La adquisición de BG le permitió a la petrolera aumentar en un 28 % su producción, equivalente a 3.508 barriles de crudo diarios.
La empresa señaló que ha completado la venta de Dansk Fuels en Dinamarca, mientras que tiene intención de construir un importante complejo petroquímico en Pensilvania (EEUU).
El total de dividendos distribuidos a los accionistas en el segundo trimestre del año fue de 3.330 millones de euros (3.700 millones de dólares), de los que 1.080 millones de euros (1.200 millones de dólares) fueron liquidados con la emisión de 50,5 millones de acciones.
La empresa ya había anunciado a principios de año un plan de recortes de empleos, con la supresión de unos 12.500 puestos de trabajos.
Según los expertos, si los precios del petróleo se mantienen en niveles muy bajos, las empresas petroleras tendrán que buscar otras fuentes de ingresos, como la venta de activos.
En cuanto a las perspectivas para el tercer trimestre, Shell señaló que con sus desinversiones en Dinamarca, Noruega y Francia, el volumen de venta de productos petroleros se verán reducidos en unos 200 mil barriles diarios comparado con el tercer trimestre del año pasado.
Esta semana, BP también vio reducidos sus beneficios netos en un 37,8% en el semestre frente al mismo periodo de 2015 por la debilidad de los precios del crudo.