MADRID (Reuters) - La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) criticó el jueves la existencia de una serie de restricciones contempladas por las regulaciones locales de las viviendas turísticas.
"¿Es realmente necesario para alquilar una vivienda turística que todas las perchas de la casa sean iguales?", se preguntó el regulador en su blog oficial, en referencia a una normativa vigente en las Islas Canarias.
La CNMC, que está llevando a cabo estos días una consulta pública sobre la economía colaborativa, denunció en su blog que "bajo la justificación de equipamientos mínimos ... la normativa autonómica de viviendas acaba imponiendo un serie de restricciones que incrementan los costes para aquellos que desean acceder a este sector de actividad".
El regulador, que también defiende otras iniciativas de economía colaborativa como los servicios de transporte que ofrece Uber, recomienda eliminar no solo "requisitos técnicos innecesarios o desproporcionados" en el sector de las viviendas de uso turístico sino también las normativas de estancia mínima o máxima.
Este último mensaje se dirige a la Comunidad de Madrid cuyo gobierno conservador aprobó en febrero de 2015 un decreto que exige que "las viviendas de uso turístico no podrán contratarse por un período inferior a cinco días", un requisito favorable a los intereses del sector hotelero que se puede quedar de esta forma con los turistas que visitan la capital solo durante un fin de semana.
Pero pese a las trabas existentes, las viviendas de uso turístico se han convertido en un serio rival para el sector hotelero, no solo por la creciente demanda de alojamientos alternativos sino también por la fuerte diferencia de precios entre hoteles y apartamentos.
Según la plataforma extrahotelera Wimdu, durante la actual feria de Sevilla, el precio medio por noche en un piso turístico en la capital andaluza es de 39 euros frente a los 91,45 euros que el turista paga de medio en un hotel.