Bruselas, 19 dic (.).- Alemania, el país que ha liderado hasta ahora la oposición a un tope al precio del gas en la Unión Europea, ha votado este lunes a favor de la medida por "solidaridad" con el resto de sus socios afectados por la carestía energética y porque el pacto acordado hoy en Bruselas tiene "suficientes salvaguardas".
"Igual que los otros países han sido solidarios con Alemania en el pasado, nosotros hemos mostrado hoy la solidaridad con este instrumento", ha dicho el ministro de Energía alemán, Robert Habeck, al término de la reunión que celebraron hoy los ministros europeos del ramo para acordar el tope al gas en 180 euros el megavatio-hora (MWh) en los contratos mayoristas de futuros a partir del próximo 15 de febrero.
El acuerdo ha sido difícil, hasta el punto de que se han necesitado el triple de reuniones de las que son habituales en Bruselas a lo largo de un año.
Alemania quería un precio más alto ante el temor de que uno inferior pudiera poner en riesgo el suministro de gas en la Unión Europea, pero según Habeck, este lunes se han pactado "tantas salvaguardas" que espera que la medida "no afectará al suministro".
Los ministros de Energía pactaron hoy un tope al gas de 180 euros el megavatio-hora en los contratos vinculados a los grandes índices de gas como el TTF, umbral por encima del cual la UE no podrá comprar este hidrocarburo.
Pero ese tope se aplicará si existe una diferencia de precio de, al menos, 35 euros por encima del precio medio del gas natural licuado en los mercados internacionales durante tres días consecutivos, para garantizar que el mercado europeo es atractivo para los proveedores.
Una vez activado, se aplicará "durante al menos 20 días" y, si el umbral "dinámico" cae por debajo de los 180 euros, se desactivará automáticamente.
Si el precio de referencia del GNL es inferior a 143 euros, el límite de puja dinámica se mantendrá en la suma de 143 euros y 35 euros.
Otra salvaguarda del pacto es que el mecanismo dejará de funcionar "si la demanda de gas aumenta un 15 % en un mes o un 10 % en dos meses, las importaciones de GNL disminuyen significativamente o el volumen negociado en el TTF cae significativamente en comparación con el mismo período hace un año", agregó el Consejo.
"No se trata de una concesión de Alemania, diría, simplemente que es inteligente aceptar las precauciones", ha afirmado el ministro alemán, quien ha agregado que Europa ha demostrado que es capaz de "alcanzar compromisos".
El acuerdo ha salido adelante con el voto en contra de Hungría, las abstenciones Austria y Países Bajos.
El ministro neerlandés de Energía, Rob Jetten, justificó su abstención porque, en su opinión, se debería haber completado una evaluación de impacto del tope al precio del gas antes de implementar el mecanismo de corrección, aunque consideró que los ministros han logrado mejoras frente a la propuesta inicial de la Comisión.
"Todo lo que hacemos aquí es por un lado asegurar la seguridad del suministro y por el otro cómo gestionar los elevados precios de la energía, y aún no estoy del todo convencido de que un mecanismo de corrección del mercado vaya bien para ambos problemas", explicó el titular neerlandés a su salida del Consejo de este lunes.
Jetten aseguró que los Estados miembros tienen mucho margen para evitar que se acabe activando este mecanismo "con las compras conjuntas y asegurándonos de que no competimos los unos con los otros en los mercados internacionales", que fue, recordó, "el motivo principal por el que hubo pico de precios en verano".
Sin embargo, precisó, Países Bajos no ha votado en contra del acuerdo por los muchos pactos logrados entre los ministros de Energía en los últimos doce meses "para que la UE supere el invierno".
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