El Gobierno argentino autoriza la compra de hasta 2.000 dólares al mes

Buenos Aires, 27 ene (EFE).- Los ciudadanos argentinos que justifiquen ingresos superiores a los 7.200 pesos mensuales (900 dólares al cambio oficial) podrán adquirir desde hoy divisas extranjeras para su ahorro, con un límite máximo de 2.000 dólares al mes, según oficializó hoy el Gobierno argentino.

La adquisición de moneda extranjera tendrá un recargo del 20% a menos que se deposite a plazo fijo en una entidad bancaria por un plazo mínimo de un año, informó hoy el jefe de Gabinete argentino, Jorge Capitanich.

El tope mínimo fijado por el Gobierno para acceder al dólar, 7.200 pesos mensuales, equivale a dos salarios mínimos.

Además, los contribuyentes podrán destinar hasta el 20 % de sus ingresos anuales para comprar dólares al tipo de cambio oficial con un tope máximo de 2.000 dólares.

Con esta iniciativa, dijo el jefe de Gabinete, "administramos definitivamente la regulación de la tenencia de dólares. Es una administración prudente, considerando que en Argentina ha existido un proceso de atesoramiento por 143.000 millones de dólares durante los últimos diez años".

"La metodología implementada es para el pequeño ahorrador, para aquel que quiere acceder a un nivel de tenencia en dólares y eso es lo que estamos instrumentando", añadió.

Capitanich explicó que los interesados pueden acceder a la página oficial de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), completar un formulario con su clave fiscal y conseguir un recibo con el que comprar los dólares en los bancos en un plazo de 72 horas.

El funcionario confirmó que la venta de divisas para el turismo y los gastos con tarjeta de crédito en el exterior mantienen el gravamen del 35 por ciento, pese a que el ministro de Economía, Axel Kicillof, había anunciado el viernes en declaraciones a una emisora local que el impuesto caería el 20 por ciento.

"Es un sistema transparente y automático", subrayó Capitanich, que rechazó las críticas de opositores y analistas que cuestionan la falta de un plan económico integral en el Ejecutivo de Cristina Fernández.

"Es compatible con una política de administración prudente por parte del Estado", insistió el jefe de Gabinete.

"Muchos critican que se trata de una medida aislada, sin concepción de plan integral, pero es importante observar a través de la historia argentina que no se interpreta lo que significa la política fiscal, monetaria y cambiaria de modo congruente y conexo y eso es lo que estamos instrumentado de manera progresiva", apuntó.

"Es una medida positiva que va a contribuir a que Argentina siga creciendo", concluyó Capitanich, que insistió en la voluntad del Gobierno por controlar la inflación mediante monitoreo de precios y, en caso necesario, "medidas correctivas".EFE

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