Madrid, 1 febr (.).- El grupo Ezentis (BME:EZEN), especializado en la instalación y mantenimiento de infraestructuras tecnológicas y energéticas, continúa reajustándose en bolsa tras permanecer más de un año suspendido el valor y después de cosechar avances del 142 % en las sesiones de este lunes y martes, ayer la compañía comenzó el descenso que hoy continúa con una bajada del 10,45 %.
A las 11:00 horas, los títulos de Ezentis cotizan a 0,168 euros, tras caer dicho 10,45 %.
Desde que volviera a cotizar el pasado lunes, la compañía sube en bolsa un 68 %.
Ezentis volvió a cotizar el pasado lunes tras permanecer el valor suspendido de manera cautelar en bolsa desde el 2 de diciembre de 2022 tras informar la compañía dos días antes de que consideraba conveniente solicitar concurso de acreedores debido a la situación de tesorería en la que se encontraba la sociedad.
En aquel momento, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) decidió suspender el valor hasta que la compañía aportara la información suficiente y la pasada semana Ezentis solicitó el levantamiento de la suspensión, al entender que ya no existían dudas sobre la capacidad del grupo para continuar sus operaciones.
La CNMV decidía levantar el pasado viernes, con efectos del lunes día 29, la suspensión cautelar que pesaba sobre Ezentis "después de haber sido puesta a disposición del público información suficiente de las circunstancias que aconsejaron la adopción del acuerdo de suspensión".
Ayer miércoles, el valor cerró con una caída del 13,15 % en bolsa después de subir un 142 % en tan solo dos sesiones y al cierre de la bolsa el valor de la acción se encontraba en 0,1876
El grupo tecnológico se disparó un 72,04 % el lunes y un 40,4 % el martes.
En abril de 2023, la Junta de Accionistas de Ezentis aprobó un plan de reestructuración del grupo, que pasó por dividir la compañía en dos sociedades, una tecnológica, que se quedó al 100 %, y otra de telecomunicaciones, en la que participa con un 5 %, así como por la reducción del capital social hasta 60.000 euros.
Se trató de un plan de reestructuración que había sido aprobado por el Consejo de Administración el 31 de marzo del pasado año, que contemplaba una quita del 80 % de los 167 millones de euros de deuda y una reducción de capital en 139 millones, todo ello con el objetivo de dar continuidad a una sociedad.
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