SAO PAULO, 1 mar (Reuters) -El Gobierno brasileño dijo el viernes que la muerte de más de 100 personas que buscaban ayuda humanitaria en Gaza demuestra que la acción militar de Israel no tiene límites "éticos ni legales", y volvió a pedir un alto el fuego inmediato en el conflicto.
"La humanidad está fallando a los civiles de Gaza. Y es hora de evitar nuevas masacres", declaró el Ministerio de Asuntos Exteriores de Brasil en un comunicado. "Corresponde a la comunidad internacional poner fin para, solamente así, evitar nuevas atrocidades".
El jueves, las fuerzas israelíes mataron a tiros a más de 100 palestinos mientras esperaban una entrega de ayuda, según las autoridades sanitarias de Gaza.
Los funcionarios israelíes han desestimado esa cifra y han culpado de las muertes a las multitudes que rodearon los camiones de ayuda, diciendo que la gente fue pisoteada o atropellada.
"El gobierno de (el primer ministro, Benjamin) Netanyahu vuelve a mostrar, por acciones y declaraciones, que la acción militar en Gaza no tiene ningún límite ético o legal", aseguró Brasil, calificando los comentarios de funcionarios israelíes sobre el incidente como "cínicos".
Brasil e Israel han estado en una disputa diplomática por los comentarios hechos por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva comparando la guerra de Israel en Gaza con el genocidio nazi durante la Segunda Guerra Mundial.
Israel describió los comentarios como un grave ataque antisemita y exigió una disculpa. Fuentes brasileñas han dicho que eso no sucedería.
La guerra de Gaza comenzó cuando el grupo militante islamista palestino Hamás envió combatientes a Israel el 7 de octubre, matando a 1.200 personas, en su mayoría civiles, y tomando 253 rehenes, según los recuentos israelíes. Desde entonces, más de 30.000 palestinos en Gaza han muerto, dicen funcionarios de salud del enclave.
El país sudamericano, que también ha condenado los ataques de Hamás como "terroristas", reiteró que un alto el fuego, la entrada de ayuda humanitaria en Gaza y la liberación de todos los rehenes son "absolutamente urgentes".
(Reporte de Peter Frontini, Editado en Español por Manuel Farías)