Análisis realizado al cierre del mercado estadounidense por Kathy Lien, directora general de Estrategia FX en BK Asset Management.
Los informes económicos de Estados Unidos, que han resultado peores de lo previsto, no han disuadido a los inversores de comprar dólares. El billete verde ha ganado posiciones hoy con respecto a las demás monedas principales, pues el mercado se ha recuperado de los efectos de la reversión técnica de la semana pasada.
Según los últimos informes, la actividad de los sectores manufacturero e inmobiliario se ralentizó en octubre y principios de noviembre, aunque estos cambios no han sido ninguna sorpresa. Un mes antes, las ventas de vivienda construida aumentaron hasta su segunda cota más alta desde 2007, así que la caída del -3,4% registrada en octubre no es de extrañar. Además, como hemos visto en las previsiones y resultados de las empresas, el fuerte avance del dólar está erosionando poco a poco la demanda externa y la actividad manufacturera.
Sin embargo, si echamos un vistazo al brusco repunte del dólar, así como a la escasa reacción de los bonos del Tesoro y los valores, está claro que a los inversores no les han preocupado mucho los informes de hoy. En torno a un 90% de los economistas cree que la Fed subirá los tipos de interés el mes que viene y, según los futuros sobre los fondos de la Fed, los inversores han establecido los precios en función de este movimiento, que es por lo que nosotros estamos convencidos de que la reversión observada la semana pasada es técnica, y no fundamental.
Aunque podría argumentarse que la venta masiva de dólares se debió a que los mercados habían descartado completamente la subida de los tipos de interés, quedando todavía más de tres semanas para la reunión del FOMC, aún le queda fuelle a la larga evolución del dólar. Nuestra opinión se ve reforzada por las declaraciones de Yellen, que hoy ha asegurado que el despegue está garantizado si el empleo y la inflación siguen al alza, aunque una subida demasiado brusca de los tipos frenaría la expansión, así que la implementación de ajustes será gradual tras el despegue.
De hecho, creemos que el dólar resplandecerá antes de la decisión sobre política monetaria del 16 de diciembre, y que caerá cuando la Fed deje claro que la futura subida de los tipos de interés se implementará de forma gradual. Esta reducida semana de negociación debería beneficiar también al dólar porque todo apunta a que la mayoría de los informes económicos del calendario pondrán de manifiesto la recuperación de la economía estadounidense. Esto incluye el informe del PIB del tercer trimestre previsto para este martes que, según los economistas, se revisará al alta. La confianza de los consumidores también debería beneficiarse de la mejora observada en el mercado laboral y de los bajos precios de la energía.
El EUR/USD se ha situado momentáneamente por debajo del nivel de 1,0600 por primera vez en siete meses. Aunque la actividad económica de la eurozona ha ganado fuelle en noviembre, esta mejora no disuadirá al Banco Central Europeo de ampliar los estímulos la semana próxima. Los datos no incluyen el impacto de los atentados de París en la economía y, si la actividad de Francia ya estaba disminuyendo antes de eso, no ha hecho más que debilitarse desde entonces. Es alentador comprobar que la actividad de los sectores manufacturero y de los servicios de Alemania aumenta pero, a sólo una semana de la reunión del BCE, el mensaje del banco central ha sido coherente y claro: quieren y pueden ampliar sus medidas de apoyo a la economía. A diferencia de la Fed, su decisión será firme pues están intentando de convencer a los mercados de que podrían implementar medidas adicionales si fuera necesario. Nosotros seguimos esperando a que el EUR/USD se sitúe por debajo del 1,0520 y, teniendo en cuenta la cantidad de informes económicos pendientes de publicación, eso podría pasar durante esta reducida pero movida semana de negociación.
Tras no alcanzar el EMA de 200 días, la libra ha ampliado pérdidas con respecto al dólar. El Reino Unido no ha publicado informes económicos hoy pero Kohn, miembro del Banco de Inglaterra, ha advertido acerca de una serie de cuestiones fundamentales relativas al mercado inmobiliario británico, incluyendo la oferta de vivienda y los términos de los préstamos.
Esta semana va a ser relativamente liviana en cuanto a lo que se refiere a datos procedentes del Reino Unido pero Mark Carney ofrecerá declaraciones sobre el informe trimestral de inflación y el canciller Osborne realizará el anuncio de otoño. Si mantienen su tono prudente, la libra podría descender aún más. De hecho, nosotros esperamos que se perciba esta prudencia y que, por lo tanto, la libra pierda posiciones esta semana con respecto al euro y las gane frente al dólar.
Las dos divisas que peor actuación han ofrecido hoy son curiosamente las que mejor se negociaron la semana pasada. Los dólares australiano y neozelandés se han dejado más de un 0,5% de su valor con respecto al billete verde. No se han publicado más informes económicos por parte de ninguno de los dos países pero la caída de los precios del oro y el cobre ha ejercido mucha presión sobre ambas divisas, muy vinculadas a las materias primas. Los inversores del AUD estarán pendientes también en las declaraciones de los funcionarios del Banco de la Reserva de Australia, mientras que los tradersdel NZD podrían actuar en función de los datos comerciales de octubre. No esperamos mucha sorpresa por parte de los dólares australiano y neozelandés; de hecho, creemos que la demanda de dólares estadounidenses del mercado será lo que determine el rumbo de sus dos homónimos.
El USD/CAD se ha disparado hasta registrar máximos en 1,3435 durante la primera parte de la jornada de negociación en Norteamérica. Este movimiento situó el par de divisas a 20 pips de sus máximos de 11 años. Sin embargo, mientras que los precios del petróleo se mantengan en más de 40 USD por barril, este nivel de resistencia debería frenar el avance del USD/CAD. Canadá no publicará informes económicos esta semana, de manera que la atención se centrará en los datos sobre el reservas de petróleo y su impacto en el oro negro.