Los banqueros centrales han inundado los mercados con declaraciones durante las últimas semanas, embarcando a los mercados en una montaña rusa. Después de la reunión del G7, el Ministro de Economía japonés declaró que ningún participante del G7 se opuso a la idea de una intervención coordinada para contrarrestar el fortalecimiento del JPY. El JPY se debilitó frente al dólar durante cuatro sesiones de operación consecutivas, perdiéndo el 2.32 %.
El Banco de la Reserva Australiana y el Banco de Canadá publicó sus decisiones sobre las tasas de interés el martes. Como era de esperarse, el BRA redujo su tasa de referencia en 25 puntos base, cuando se evaluaba una flexibilización monetaria de 50 puntos base de los índices swap a un día. El movimiento. sin embargo, terminó siendo razonable a la luz del PIB Australiano publicado al día siguiente que mostró que la economía se ha expandido en un 1.3 % T7T, más del doble de lo que los analistas habían pronosticado. El AUD tuvo un alza contra la mayoría de sus contrapartes ante las noticias, y obtuvo la mayor ganancia de las últimas 3 sesiones del 3.11 % frente al alza del dólar estadounidense desde un mínimo de 8 meses. El Banco de Canadá se abstuvo de realizar una alza en las tasas para frenar el endeudamiento familiar causado por el contagio de la actual crisis de la deuda europea hacia el resto de las economías del mundo.
El CAD aumentó un 2.27 % en el curso de dos sesiones. Los mercados se alegraron y recuperaron el apetito de riesgo, sacando a los mercados bursátiles asiáticos de la tendencia bajista que comenzó en el mes de mayo. Metales base como el aluminio y el cobre no reaccionan con el mismo dinamismo, ya que los temores a un empeoramiento de la economía China y los proyectos se han visto acentuados por las cifras a la baja del PMI de Servicios y el Industrial. El banco central de China intervino ayer mediante una reducción de las tasas de interés en 25 puntos base, y reprogramó el ajuste de las condiciones de acceso a préstamos para principios de 2013. La medida fue una sorpresa, ya que el Banco Popular de China ha estado lidiando con los ratios RRR desde 2008 para controlar los mercados. Las medidas de flexibilización del BRA y del Banco Popular de China no fueron seguidas por ningún otro banco central tal como el BCE, BoE y la Fed.
El BCE no recortó su tasa de interés a mínimos sin precedentes por temor de paralizar a los mercados de préstamos interbancarios, cosa que el banco central está tratando de evitar con sus permanentes asignaciones. Lo que es más, el BoE decidió mantener su objetivo de compra de activos en GBP 325 mil millones, y su tasa de interés en el 0.50 %, sin tener en cuenta el evidente deterioro de la economía del Reino Unido caracterizado por una permanente inflación, el lento aumento de los salarios y un índice IPP de entrada y salida menor al esperado (el 0.1 % vs el 1.3 % y el -0,2% vs el 0.1 %, respectivamente). El testimonio de Bernanke de ayer frente al congreso tuvo sus repercusiones en los mercados con frágil recuperación, recortando el apetito de riesgo, aunque el Presidente de la Fed se mantuvo en afirmaciones de carácter general.
De hecho, Bernanke confirmó que la situación en Europa es un factor muy importante para la recuperación de EE.UU, y la Fed estará observando el progreso para evaluar otra intervención. El Presidente también aseguró al banco central tanía más instrumentos para apuntalar la economía sin revelar los detalles, y que la Fed está dispuesta a actuar después de estudiar la situación. El EUR cayó un 1.36 % desde el máximo de ayer en 1.2453, y la mayoría de los principales contrapartes del USD le siguieron. El JPY sin embargo, aumentó un 0.50 % frente al dólar estadounidense, debido a que el Banco de Japón no está logrando detener el aumento de las operaciones de refugio.
El oro bajó un 4.16 % luego de la declaración de Bernanke, la segunda de este tipo tras la caída del -5.82% el 29 de febrero. El petróleo también revirtió un alza de tres sesiones frente a la noticia, bajando un 5.78 % en un lapso de dos sesiones. La pregunta sigue siendo si el BRA y el Banco Popular de China actuaron demasiado pronto, o si la Fed, el BoE y el BCE no están capturando el alcance pleno de la actual situación económica mundial. Creemos que descubriremos más luego de las elecciones griegas del 17 de junio y de la cumbre del G20 del 18 y 19 de junio.