Las perspectivas económicas se deterioran drásticamente, de ahí que el BCE se haya apresurado a adelantar el lanzamiento de nuevas inyecciones de liquidez. Los TLTRO comenzarán en septiembre, y se prolongarán hasta marzo de 2021. Para sorpresa de buena parte del mercado, el BCE también ha aplazado 'oficialmente' los plazos barajados para su futura subida de tipos.
El comunicado emitido por el Banco Central Europeo a las 13:45 hora española ha sorprendido a gran parte de los analistas. Las firmas de inversión anticipaban que la entidad realizaría hoy mismo un pronunciamiento claro sobre las inyecciones de liquidez, y aplazaban a próximas reuniones el reconocimiento 'oficial' de que la subida de tipos se prorrogará más allá de lo previsto por la institución. Lejos de dejarse mayor margen de actuación para próximas reuniones, el BCE ha sacado buena parte de la artillería que tenía preparada para combatir la desaceleración, y los incipientes temores de recesión.
Pero no todas las decisiones adoptadas hoy suponen un revulsivo para los bancos. El BCE se ha apresurado también a modificar el comunicado oficial en el que fija los plazos para su futura subida de los tipos de interés.
Desde el pasado mes de junio el BCE se mantenía fiel en sus comunicados al mensaje de que los tipos de interés continuarían sin cambio, en el 0%, al menos hasta el verano de 2019. Los analistas no prevén ahora un repunte de los tipos hasta bien entrado 2020.
Por otra parte, el BCE ha rebajado nada menos que en seis décimas su previsión de crecimiento de PIB para 2.019 en la eurozona, desde el 1,7% estimado en diciembre hasta el 1,1%.
ANÁLISIS IBEX-35
Técnicamente, el selectivo de la bolsa española se enfrenta a una resistencia muy importante situada en niveles de 9.325 (9.400 con un pequeño filtro de aplicación) que no ha sido capaz de rebasar en el más riguroso corto plazo. Esta zona es sumamente interesante, puesto que confluyen tanto la media móvil de 200 sesiones, su resistencia decreciente o parte alta del canal bajista que podemos ver en el gráfico adjunto, y también su resistencia horizontal.
Los inversores en Europa parece ser que esperan a que Wall Street rebote con contundencia y con el volumen necesario, para tomar posiciones alcistas y que rompan por fín zonas como las que acabamos de comentar. Si esto no se produce, o en nuestro continente no entra el dinero suficiente en un breve espacio de tiempo (antes del cierre semanal de mañana viernes), lo más probable será que acometamos un proceso correctivo, en principio para formar un pull-back hacia zonas de soporte como podrían ser los 9.150 o los 8.900 puntos en el peor de los casos.
En cualquier caso, por encima de 9.400, la inmediatez de las alzas nos llevarían hasta 9.600 puntos primeramente donde encontraríamos su resistencia intermedia más cercanal. Después el recorrido sería mucho mayor pero debe entrar dinero y el volumen debe ser mucho mayor.
DAX
En el transcurrir de las diferentes sesiones, el principal índice de la bolsa alemana, el Dax, sigue sin poder romper al alza ninguna estructura técnica de relevancia. Los 11.800 puntos se entienden como una resistencia de cierto calado donde confluyen diversos indicadores técnicos, como son su resistencia decreciente, la horizontal y además la media móvil de 200 sesiones. Es complicado que este nivel sea superado en el primer intento, por lo que lo más habitual en estos casos es que se produzca cierto pull-back hacia soportes para volver a remontar con mayor volumen y dinero fresco.
El rebote iniciado desde los 10.250 ha sido de libro y la sucesión de mínimos crecientes también, es decir, el índice ha hecho lo que tenía que hacer pero no resuelve definitivamente al alza, al menos por el momento. Por debajo de 11.400 se incrementarían las caídas y el deterioro de este índice, o sea que si se produce un pull-back no debería ir más abajo de este nivel.
Soporte de medio plazo y más consistente, en 11.050 puntos.
DOW JONES
El mercado americano ha sufrido cierta corrección desde su zona de resistencia intermedia en niveles de 26.285 puntos donde ha formado una especie de doble techo entre noviembre pasado y este mes, donde ha formado un claro pull-back hacia el primer soporte en 25.500 puntos, para seguramente seguir subiendo y volver a probar otra vez a romper al alza buscando la zona de máximos interanuales.
En la jornada de hoy, y en el momento de cierre de estas líneas, el Dow Jones se sostiene justo en zona de soporte y todo parece indicar que no llegará la sangre al río después de las declaraciones de Mario Draghi en el seno del BCE que han terminado por afectar también al otro lado del Atlántico por las empresas que tienen vinculación con Europa, en parte.
Mientras se respeten esos 25.500 puntos, no hay peligro de una recaída hacia el siguiente soporte en 24.875 que anularía la actual tendencia alcista. El mercado americano se debilita algo pero todavía no ha perforado soportes. Es momento, en algunos casos, de ir haciendo cartera en valores en los que se tenga una rentabilidad atractiva.
ENDESA
Si hay un sector dentro del selectivo de la bolsa española que ha mejorado su aspecto técnico de forma clara es el de las utilities. Valores como Endesa (MC:ELE), Iberdrola (MC:IBE), Naturgy (MC:NTGY)... están sirviendo de refugio para los inversores. Desde el punto de vista técnico, y poniendo nuestra atención en Endesa, sus títulos rompieron ayer, y han desplegado una bonita vela blanca con cierre en máximos de la sesión y entran en subida libre técnica y absoluta.
Ya desde el último trimestre del ejercicio pasado apuntaba a buenas maneras iniciando un rebote desde la zona cercana a los 16,50 euros desde donde ha terminado por construir una secuencia de máximos y mínimos relativos crecientes en gráfico de prácticamente todas las temporalidades, y ahora ya se sitúa en zona de máximos anuales con objetivos cercanos a los 23,50 euros que es la extensión del último de los laterales que había formado el valor, aunque un valor en subida libre no tiene resistencia alguna, pero sí que se puede determinar de alguna forma el posible alcance del rebote.
Para mantener quien tenga la suerte de estar dentro, y para acometer compras, deberíamos esperar a un retroceso hacia los 22,30 euros que es aproximadamente el 50% de la última gran vela desplegada, todo ello con un stop que pasaría por no perder los 21.75 euros la acción.
