Tras un sorprendente dato de inflación minorista conocido el jueves, y que le dio aire al dólar, nos espera una sesión americana con gran cantidad de informes.
En principio, ninguno de ellos alcanza el nivel de impacto necesario para cambiar tendencias, aunque en un contexto algo más calmo como el que se está viendo en estos días, estos datos podrían acelerar la marcha de las divisas principales.
Los índices de producción industrial y de capacidad de utilización se conocerán a las 9:00 del este, seguidos por el índice de confianza del consumidor de la Universidad de Michigan, a las 10:00. Ya en la tarde, y prácticamente fuera de horario de operaciones, la entrada de capitales extranjeros, que hace años estaba entre los datos más seguidos, cerrará la agenda de noticias de la fecha.
El viernes ofrece, por el momento, un panorama alcista para el dólar en prácticamente todos los cruces. La excepción viene por el lado del yen, que el jueves logró fortalecerse en el inicio de la jornada, y pese a que retrocedió en las primeras horas de la fecha, mantiene un tinte alcista de corto plazo. La superación de 119,45/50 podría cambiar este rumbo, aunque no aparece como algo probable en la sesión americana.
El euro, en tanto, frenó su baja de la víspera recién hace minutos, en una zona típica de soporte para divisa europea, como lo supone 1,1330. Sin embargo,el gráfico de 4 horas presenta una marcada tendencia bajista, con indicadores que muestran una alta probabilidad de baja de la moneda única en la sesión americana. Precisamente, el quiebre de 1,1335/30 podría generar una velocidad bajista a la zona de 1,1280, segundo soporte de importancia.
En cuanto a la libra esterlina, ha logrado mantenerse más firme ante el dólar en los últimos dos días, si bien luce sobre comprada y con un soporte fuerte en 1,5412. Si este es vulnerado, lo cual aparece como muy probable, la zoan de 1,5385 y, más abajo, 1,5340, serán los objetivos a seguir.
El dólar australiano, por su parte, demora el cumplimiento de una figura de cambio de tendencia -doble suelo-, apreciable en gráfico diario y del cual dimos cuenta días atrás. Los últimos tres días mostraron al Aussie sin fuerza, con un movimiento que asemeja una especie de pullback al neckline de la figura mencionada, aunque deberá quebrar la zona de 0,7340 para retomar su camino alcista y buscar el objetivo del doble suelo mencionado, en 0,7660.
En otro orden, el petróleo retoma un camino alcista de corto plazo, aunque el mismo no parece sustentable salvo que logre superar la zona de 49 dólares (WTI). De todas formas, este movimiento le sigue dando aire a las divisas vinculadas al mismo, como el dólar canadiense, que cotiza a precios que no tocaba desde agosto pasado.
El Loonie tendrá un examen a las 8:30 del este con la publicación, en Canadá, de la cifra de ventas minoristas, cuyo pronóstico no favorece en principio a la moneda local.