Escasas referencias ayer mientras las bolsas y los principales activos de riesgo continuaron con los descensos. Así, el S&P500 (US.500) cerró un -1.1% abajo. Como consecuencia del escenario de incertidumbre, el principal beneficiado siguió siendo el dólar (USD) al tiempo que hemos conocido nuevas noticas sobre las dificultades que algunos países tendrán para cumplir el pacto fiscal de la UE, la rebaja de las previsiones del crecimiento en Alemania para 2012 hasta el 0.4% frente al 0.8% que estimaban previamente y, en el lado positivo, un dato de sector industrial en China mejor de lo esperado pero justo por debajo de la barrera que denota la desaceleración en el país, aunque quizá algo menos severa de lo que mostraban los últimos informes. HOY PENDIENTES DE: Avalancha de datos macro en EEUU, con el paro y los informes relativos a la industria como principales referencias, que apuntan a un optimismo muy leve. Por el momento las estimaciones y publicaciones actuales de crecimiento de los beneficios de las compañías del S&P500 para el 3T2011 (vs 3T2010) se mantienen en el +17.7% comparado con el +17% que se estimaba a principios de Julio, según datos de Reuters. Del 92% de las compañías del S&P500 que ha publicado resultados del 3T2011, el 70% ha batido previsiones, en la parte media del rango normal 65%-75%. Para el 4T2011 las previsiones apuntan a crecimientos del +10.4%
Decenas de bancos de Europa han vendido grandes cantidades de seguros a otros bancos e inversionistas como protección contra los riesgos de impago de países en problemas, en lo que constituye el ejemplo más reciente de los enormes enredos financieros entre los bancos y gobiernos del continente. Los últimos datos divulgados por los reguladores bancarios europeos la semana pasada sugieren que los riesgos de que los bancos sufran pérdidas vinculadas a sus carteras de bonos soberanos europeos podrían ser mayores y más extendidos de lo que se creía.
Italia y Alemania tuvieron una exitosa venta de bonos el miércoles, pero el marcado contraste en sus costos de financiación ponen de relieve la frágil confianza en la deuda italiana y la aparente seguridad de la alemana. El alza de los costos de Italia en la subasta del miércoles a un nuevo máximo en la era del euro no ayuda a calmar los temores sobre la capacidad del país de continuar recaudando fondos a niveles sostenibles