Después de que su economía se desplomara un 20,4% durante el segundo trimestre, algunos han bautizado al Reino Unido como "el enfermo de Europa". De hecho, ésta es la peor contracción jamás registrada en el Reino Unido, y la suya es la peor recesión provocada por el coronavirus de entre todas las grandes economías del mundo.
El Banco de Inglaterra ha dicho recientemente que el país se enfrenta a la peor recesión en un siglo. Ésa es una revisión al alza de sus aciagas previsiones de mayo, cuando los pronósticos hablaban del peor desplome económico en 300 años.
Y sin embargo, la libra esterlina ha registrado su mejor trimestre frente al dólar estadounidense en más de un año, de abril a junio.
¿Y ahora qué? ¿Por qué iba a el par GBP/USD a superar expectativas cuando su banco central está ocupado emitiendo aciagas previsiones económicas?
La libra partió desde un punto mucho más bajo debido a una serie de problemas relacionados con la votación del Brexit de 2016 y continuó en marzo con una venta masiva provocada por el COVID-19. Todos estos factores contribuyeron a que el par cayera más que otras monedas importantes, lo que la convirtió en una ganga. Además, se vio impulsada por unos datos de ventas y servicios minoristas mejores de lo esperado, además de un informe de desempleo razonablemente positivo.
La gran venta actual de dólares también ayudó a la maltrecha moneda, y además el par subió tanto frente al dólar como al euro, al reanudarse las conversaciones sobre el Brexit, lo que sugiere que parte de la caída anterior se debió sólo a los problemas del Brexit, y cualquier buena noticia en ese frente se tenían en seguida en cuenta por los traders más ágiles.
Por lo tanto, una confluencia de dinámicas —alivio ante una recesión histórica menor, datos mejores de lo esperado y progreso en el Brexit— parece haber eliminado las posiciones cortas del mercado, creando una breve compresión.
Esa reacción se ve más claro en el gráfico técnico.
En sólo las 11 sesiones del 17 al 31 de julio, la libra subió un 5,28%, lo que responde a la rápida reducción de posiciones cortas. Después de eso, la moneda pasó por un período de descanso, en el que pareció llegar al equilibrio con el dólar.
Sólo el agudo repunte del 1% de ayer disipó esa ilusión. La demanda absorbió toda la oferta disponible dentro de la congestión en forma de banderín, un patrón de continuación, y atravesó el techo, buscando más oferta a precios más altos.
Este patrón de trading presumiblemente configura una reacción en cadena (otro breve repunte) y activa posiciones largas para impulsar la libra aún más.
Cabe destacar que la libra ya había experimentado otro repunte de este tipo, disparándose más de un 6% entre el 18 de mayo y el 10 de junio, justo después de la dura predicción del Banco de Inglaterra que anunció la peor contracción en 300 años. Por supuesto, cuando las malas noticias no pueden mantener un activo en niveles bajos, es muy buena noticia para los inversores. Además, anteriormente, el par había repuntado casi un 11% desde los mínimos de marzo.
El patrón de trading general desde los mínimos de marzo, una cuña creciente, se considera bajista tras la caída del 13,5% observada del 9 al 20 de marzo, ya que se habría esperado que los alcistas perdieran la paciencia con la pérdida de impulso del repunte. Sin embargo, el repunte de la parte superior hizo saltar por los aires la dinámica bajista, cambiando las posiciones, forzando posiciones rápidas e incluso reversiones de posición, lo que impulsa la libra.
Este fallo del patrón bajista es alcista y conecta los puntos técnicos cuando la parte superior de la cuña ascendente fallida —un nivel de resistencia anterior— coincide precisamente con la parte inferior del banderín, un nuevo nivel de soporte.
El RSI volvió a alcanzar la condición de sobrecompra de 76, tras tomarse un respiro del nivel de sobrecompra de 80. Aunque un movimiento de retorno tras el repunte del banderín puede empujar el RSI a la parte inferior de su canal ascendente, también pueden darse potentes repuntes en grados de sobrecompra, e incluso estirarlos por un tiempo. El ROC encontró apoyo en un fondo redondeado.
A pesar de las aciagas previsiones económicas para el Reino Unido, los traders están aumentando la demanda de la moneda del país sobre una base consistente y estable, por lo que creemos que seguirá subiendo.
Estrategias de trading
Los traders conservadores esperarán a que el precio supere los máximos del 2 de diciembre, registrados en 1.3516, y a una reversión de la tendencia, antes de arriesgarse a posicionarse en largo.
Los traders moderados esperarán un movimiento de retorno, siempre que eso suceda, lo que volvería a probar la cuña rota y completaría el nivel de soporte combinado del banderín.
Los traders agresivos se posicionarán en largo tras redactar un plan de trading coherente que se adapte a su presupuesto personal y nivel de tolerancia.
Ejemplo de operación
- Entrada: 1,3200
- Orden de minimización de pérdidas: 1,3100
- Riesgo: 100 pips
- Objetivo: 1,3500 – cifra redonda psicológica que proporciona resistencia al pico del 2 de diciembre
- Recompensa: 300 pips
- Relación riesgo-recompensa: 1:3
Nota: Esto es sólo un ejemplo, no instrucciones de trading. El análisis es sólo una nota sobre las posibilidades potenciales. Si no lee y entiende este post, NO opere. Incluso si lo hace, este ejemplo no se adapta a las necesidades personales de nadie. Ajuste libremente las cifras para adaptarlas a su presupuesto, tiempo y carácter.