En 2017, escribimos una serie de publicaciones después de que China anunciara el lanzamiento al mercado de futuros de petróleo basado en yuanes. En ese momento dijimos que el esfuerzo era cuestión tanto del renminbi que competía con la posición del dólar estadounidense como moneda de reserva global, como de la nación asiática que deseaba influir en el mercado petrolero desde su posición como mayor importador de energía del mundo.
En ese momento predijimos que China, Rusia e Irán podrían formar una alianza para destronar al rey dólar, en un esfuerzo por reducir la influencia de Estados Unidos en el escenario mundial. Aunque eso no ha llegado exactamente a pasar, sin embargo, ha habido informes recientemente sobre una alianza financiera China-Rusia para derrocar al dólar. Por supuesto, esto ha venido en su mayoría de China y Rusia, pero los medios estadounidenses también lo han cubierto.
Además, el mes pasado, China e Irán firmaron un acuerdo económico masivo de 400.000 millones de dólares, parte de los cuales incluirá una iniciativa para "eludir los sistemas financieros estadounidenses y reducir el poder del dólar".
Aun así, los mercados no esperan que esos esfuerzos desbanquen al billete verde de su estatus como principal moneda del mundo.
Sin embargo, a finales de julio, el economista y expresidente de Morgan Stanley (NYSE:MS) Asia, Stephen Roach, citaba otra razón por la que el dólar podría estar en peligro: su "pésima actuación a la hora de abordar el coronavirus en comparación con otras naciones". Ha señalado que el dólar estadounidense podría caer la friolera de un 35%.
Los fondos de cobertura también se han vuelto más bajistas con respecto al dólar y han aumentado las posiciones cortas en consecuencia, aunque están apostando por el euro.
Los técnicos tampoco parecen especialmente optimistas.
El 23 de julio, nuestro objetivo inicial de 94,75 para el índice dólar fue alcanzado. Ahora, esperamos otro descenso.
Ese movimiento alcanzará la línea de tendencia alcista a largo plazo desde abril de 2011 y la cifra redonda psicológica de 90,00. Estos puntos de presión técnicos son cruciales. Si se mantienen, posiblemente podrían devolver el dólar a sus máximos de marzo registrados en 103. Si no, podríamos ver una caída mucho más pronunciada.
Por ahora, el dólar ha completado un banderín, bajista tras la caída de un 4% en sólo 11 sesiones. Hoy, los bajistas han ampliado el repunte a la baja, demostrando que están dispuestos a bajar sus ofertas para encontrar compradores nuevos e interesados, a precios más bajos.
Esta desesperación tiende a formar una reacción en cadena, lastrando aún más los precios. El objetivo implícito es el fuerte movimiento del precio, antes del tira y afloja entre compradores y vendedores que formó el banderín, terminando con los bajistas que extienden el canal descendente desde los máximos de marzo.
Estrategias de trading
Los traders conservadores podrían querer esperar a que el precio caiga por debajo del nivel clave de 90.00, que incluiría dejar atrás la línea de tendencia alcista a largo plazo.
Los traders moderados podrían posicionarse en corto en el dólar ante un retorno al banderín o a la parte superior de su canal descendente más estrecho desde la Bandera Ascendente de Junio.
Los traders agresivos podrían posicionarse en corto ya, siempre que entiendan que, en la parte inferior de un canal descendente desde marzo, siempre existe la posibilidad de un retorno hasta su parte superior.
Ejemplo de operación
- Entrada: 92,50
- Orden de minimización de pérdidas: 93,00
- Riesgo: 50 pips
- Objetivo: 91,00
- Recompensa: 150 pips
- Relación riesgo-recompensa: 1:3
Nota: Esto es sólo un ejemplo de operación, no una operación ni un análisis real, como dice el propio post. Si no entiende la dinámica y sus riesgos, no opere. Este ejemplo puede no ser correcto, incluso si aunque el análisis general lo sea. Ahí es donde entra la gestión del dinero, y debe adaptarse a su presupuesto, su temperamento y su tiempo.
Si no sabe cómo redactar un plan de trading en consecuencia, considere cualquier operación que realice nada más que una experiencia de aprendizaje.