- Especular con una reducción de la producción de petróleo en EE.UU. entraña cierto riesgo
- No podemos descartar una caída aún más dramática en los precios del crudo
- El rebote visto ayer en los precios del petróleo se puede atribuir a la medida del Banco de Suiza
La Organización de países Exportadores de Petróleo (OPEP) dio a conocer ayer su informe mensual. La organización ve una menor demanda de crudo este año, y predice además que el desplome del precio del petróleo podría frenar el crecimiento de la oferta estadounidense.
El cártel considera que en 2015 la demanda de su petróleo descenderá hasta los 28,8 millones de barriles al día, con un descenso de 100.000 barriles frente al mes anterior. Si tenemos en cuenta también que mantiene sin cambios su producción, la OPEP deja un potencial alcista muy limitado para los precios del petróleo.
Por tanto, creemos que sería muy arriesgado poner todos los huevos en una sola cesta y esperar a ver una caída en la producción de crudo por parte de EE.UU., que ha aumentado hasta su nivel más alto desde 1983.
Esto ha ocurrido en un momento en el que el número de equipos de ese país ha visto una reducción del 12%. Mientras que esto muestra que los productores marginales están siendo perjudicados por la caída de los precios, aún tenemos que ver un fuerte impacto en la capacidad de los productores estadounidenses de producir petróleo de esquisto (petróleo no convencional).
Además, Merrill Lynch rebajó su previsión final para el primer trimestre de este año a solo 31 dólares por barril de crudo Brent y a 32 para el WTI y no descartaron que si no vemos una destrucción de la oferta en breve, veremos una nueva caída de los precios del crudo.
Durante la sesión de ayer, tanto el crudo Brent como el WTI rebotaron, especialmente el WTI, que superó superó brevemente el precio del Brent después de negociar con un descuento por varios años.
Los precios del barril de WTI han vuelto a caer justo por debajo de los del Brent por el momento, pero el movimiento pone de manifiesto el hecho de que las acciones relacionadas con el petróleo a nivel mundial continúan aumentando, y esto crea un poco de presión significativa en el mercado de contado, especialmente para el crudo Brent, teniendo en cuenta su papel como punto de referencia mundial.
El rebote visto también se puede atribuir a una compensación de riesgo después de la sorpresiva medida del Banco Nacional de Suiza. Al eliminar el precio de cotización fijo en 1,20 euros por franco suizo y la posterior caída del 40% de la relativa baja volatilidad de este par de divisas, ha creado enormes pérdidas en el trading en todo el mundo y ha provocado una reducción de las posiciones en otros lugares.
Las posiciones cortas de crudo fueron la operación más favorecida, y teniendo en cuenta la agresividad de la venta masiva de hace poco, el Brent puede rebotar fácilmente hasta los 53 o incluso los 55 dólares sin cambiar el actual escenario negativo.