El volumen de contratación representa la cantidad total de transacciones realizadas en el mercado financiero en un período determinado. Además, esto nos indica la intención del mercado en una dirección y nos permite valorar la fortaleza del movimiento del precio. Es la conocida como “gasolina” que el precio necesita para desplazarse y que resulta vital para nuestro análisis.
Atendiendo a lo expuesto anteriormente, surgen dudas. ¿Cómo evaluar qué cantidad de transacciones podemos considerar como “volumen significativo” en cada uno de los distintos valores y mercados?
Al respecto, hay que decir que el volumen significativo no se puede establecer en una cifra, ya que cada mercado es diferente y, por tanto, tiene afluencia de inversores que también lo es. Para poder establecer valores de referencia que nos ayuden a saber cuándo un volumen es significativo, podemos fijarnos en el volumen que había establecido al inicio de la sesión. A partir de ahí, los volúmenes similares serán calificados de importantes. Eso sí, a los situados por debajo de la mitad, no le daremos importancia.
Los niveles de referencia de los que hablamos nos lleva a una adaptación adecuado tanto a los mercados como a las modificaciones que se podrían producir en el propio mercado en el tiempo.