Termina la semana con el dólar presentando un tono ligeramente bajista en todos los frentes. Paradójicamente, en momentos en que la Fed parece confirmar con firmeza que habrá alza de tipos de interés en diciembre, la moneda norteamericana pierde velocidad. Esto es atribuible a dos factores: por un lado, su alza fue exagerada, con rallíes de prácticamente un año y medio ante el euro, el yen, el oro y el petróleo sin pausas importantes, y por otro porque la discusión, como lo mencionamos varias veces en este espacio, pasará ahora no por las alzas de tipos, sino por su perioricidad.
Esto era habitual en los últimos tiempos de Alan Greenspan. Las sucesivas alzas de a cuarto de punto eran consideradas insuficientes por los mercados, que castigaban al dólar al momento de producirse. Eran otros tiempos, de alta inflación y el consumo en llamas. Pero los efectos pueden ser los mismos esta vez, sobre todo si se tiene en cuenta la máxima "comprar con el rumor, vender con la noticia".
Hasta el momento, en los pares principales el dólar solo ha hecho pie ante el euro que, con una nueva presentación del presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, volvió a trastabillar a primera hora. Sin embargo, ni siquiera las expresivas declaraciones del funcionario, que dejó bastante claro que inyectará dinero adicional desde diciembre, lograron contener a la divisa única, que otra vez está a punto de vulnerar 1,07. Para las próximas horas, 1,0730 es el límite para no formar una tendencia alcista que, de consolidarse, puede durar varios días.
La libra Esterlina no frena su alza, y ya superó 1,53 en la sesión europea, manteniendo una tendencia alcista en el gráfico de 4 horas; solo la sobre compra que presenta la libra en estos momentos pone en duda una continuación del rally de la misma, aunque el quiebre de 1,510, máximo del día hasta el momento, podría extender sus ganancias a la zona de 1,5333, máximo del jueves.
El yen, a su vez, también comienza a perfilarse al alza. El precio del USD/JPY quebró una línea de tendencia alcista de mediano plazo medida en el gráfico de 4 horas, y presenta ahora soportes en 122,60 y 122,20, probable neck line de una figura de cambio de tendencia -doble techo-, que comenzará a confirmar al quiebre de dicho nivel.
Los datos de inflación minorista en Canadá, previstos para las 8:30 del este, serán los informes importantes del día. El contexto favorece al dólar canadiense para las próximas horas, aunque tendrá un fuerte soporte el cruce USD/CAD en 1,3280. Si logra vulnerarlo, 1,3245, línea de tendencia alcista, será el siguiente soporte a seguir.