La propensión al riesgo ha disminuido en los mercados bursátiles asiáticos, ya que el Banco Mundial ha revisado a la baja la previsión de crecimiento para Japón y EE.UU., y ha previsto un segundo año de contracción en la eurozona. Durante esta noche se ha publicado el índice mensual de confianza del consumidor en Australia, el cual ha mejorado hasta el 0.6% desde el -4.1% anterior. En Japón, el índice anual doméstico CGPI aumentó un -0.6% (se esperaba -0.7%, el anterior fue del -0.9%), mientras que los pedidos de maquinaria mensuales y anuales en noviembre han sorprendido al alza (el intermensual del 3.9%, 0.3% previsto mientras el anterior fue del 2.6%, y el interanual fue del 0.3%, siendo el previsto del -7.3% y el anterior del 1.2%). A pesar de estos buenos datos económicos, el Nikkei 225 caía un 2.56%, ya que el yen ha seguido su periodo de ganancias frente a todas las monedas principales por segundo día consecutivo.
El USD/JPY bajaba hasta el nivel de los 88.00 a primera hora de la sesión, mientras que el EUR/JPY probaba los 116.80/117.00, mínimos semanales. El Banco Mundial ha reducido la previsión de crecimiento económico en Japón, mientras que la inversión directa china ha visto su primer año completo de caída desde el año 2009. Debido a que los inversores más reservados han centrado su atención en los importantes datos económicos de China que saldrán a la luz a finales de esta semana, el Hang Seng ha retrocedido un 0.48%, el Compuesto de Shanghai perdía un 0.82%, mientras que el Kospi y el Taiex cayeron un 0.32% y un 0.83% respectivamente.
En Estados Unidos, el dato del índice Empire Manufacturing ha sido decepcionante, ya que bajó un -7.78% (frente al -7.30 revisado y al esperado que era del 0.00), mientras que la cifra anticipada de las ventas minoristas de diciembre subieron un 0.5% (frente al 0.2% previsto, siendo el anterior del 0.3%). El índice de precios del productor (PPI) se recuperaba hasta el -0.2% desde el -0.8%, mientras que el mismo índice excluyendo la alimentación y la energía se quedó sin cambios en el 0.1%, lo que indica que los precios alimentarios y energéticos han sido el principal motor en el diferencial del índice del precio del productor en diciembre.
Como reacción a estos datos económicos, el S&P 500 subía un 0.11%, mientras que el índice industrial Dow Jones y el índice compuesto Nasdaq subían un 0.20% y un 0.31% respectivamente. El dólar estadounidense superaba a todas las monedas principales excepto al yen, mientras que el oro y la plata subieron hasta 1685 y 31.50, máximos de enero. En Europa, Juncker declaraba que la moneda única se encuentra “peligrosamente alta”. Esto es sólo una prueba más de que los políticos en todo el mundo se están preparando para una mayor “guerra de monedas”. Se puede apreciar una clara tendencia de que los mercados desarrollados están siguiendo a los emergentes en el intento por controlar sus tipos de cambio.
En la reunión de la semana que viene del Banco de Japón podríamos ver cómo Japón saca un arma poderosa para esta lucha monetaria. Mientras que el par EUR/USD bajaba hasta 1.3264, el EUR/CHF alcanzaba los 1.2400 (su nivel más alto desde diciembre de 2011), aunque sin poder subir más.
La agenda económica de hoy la forman la balanza comercial de noviembre en Italia, el IPC mensual e interanual en la eurozona, las solicitudes de hipotecas en EEUU, el IPC intermensual e interanual en EE.UU., el IPC excluyendo la alimentación y una batería de datos de Estados Unidos: la energía mensual e interanual., los flujos totales netos del TIC, los flujos netos a largo plazo del TIC, la producción industrial de diciembre y la tasa de ocupación de diciembre.