Las bolsas europeas reabrieron ayer con cifras notablemente inferiores tras una debilidad considerable en los mercados crediticios. El rendimiento de los bonos a 10 años españoles e italianos subió y el bono español alcanzó los 6,00%. El más afectado fue el MIB italiano, con una caída del -4,98%, seguido por el IBEX español que bajó un -2,96%. La España de Rajoy está sometida a una gran presión, mientras los bonos siguen subiendo, e intenta desesperadamente aplicar el recorte propuesto de 10.000 millones de euros. Sin embargo, las comunidades autónomas españolas controlan los presupuestos que tiene previsto recortar, incluida la educación. El EURUSD volvió a caer por debajo del 1,31 hasta el 1,3089, mientras que el GBPUSD bajó todavía más hasta el 1,5874.
La falta de confianza está extendiendo el sentimiento negativo desde Europa hasta los mercados asiáticos. Los índices cotizan a la baja, encabezados por la caída del -1.19% del Hang Seng. El Nikkei y el ASX australiano están ligeramente por encima, con un descenso del -0,97% y del -0,65% respectivamente. El Banco de Japón, en su reunión política, ha dejado pendientes a la mayoría de operadores que vieron frustradas las grandes expectativas que tenían puestas en los planes de ayuda adicionales. El Banco Central lucha desesperadamente por mantener las metas de inflación y hacer frente al aumento de la deuda creciente. Hoy el Yen se muestra más fuerte a causa de la debilidad del Nikkei, con el USDJPY rozando los 80,623 antes de volver a alcanzar los 80,765.
Las acciones de los EE.UU. no han sido inmunes a la caída del mercado, puesto que los decepcionantes datos generalizados iban ligados a un descenso de la bolsa de valores. El Nasdaq cayó un -1,83% seguido de una caída del -1,71% en el S&P 500 y del -1,65% del índice industrial Dow Jones. Los activos de aversión al riesgo, incluidos los bonos del Tesoro a 10 años, se han visto beneficiados de este ataque volviendo al 2,00%. El índice del dólar también subió, llegando hasta el 79,850, puesto que los inversores se refugian en instrumentos seguros. Los productos energéticos siguen bajando, con el gas natural acercándose más que nunca a la marca de $2/MMBtu, situándose en estos momentos en los 2,031 dólares. El crudo WTI también roza una cifra que no se veía desde hace meses a 101,27 dólares por barril porque el sentimiento alcista se ha sustituido con los problemas de la deuda europea.