Pasado el mediodía de Nueva York se conocerán las actas de la última reunión de política monetaria de la Fed, que tuvo lugar el 1 de febrero. Las actas reflejan las conversaciones e intercambios de opiniones de los miembros del FOMC, y si bien siempre son muy seguidas por los inversores, esta vez han tomado mayor importancia.
El motivo fundamental es que en los últimos días ha trascendido la voluntad de la Fed de elevar los tipos de interés en la reunión de marzo, algo que suena lógico si, como los mismos oficiales del organismo han sugerido, este año habrá tres aumentos. Quedan 7 reuniones y no parece prudente que dichos aumentos se produzcan en forma consecutiva.
En este contexto, el dólar se mueve al alza ante el euro, que ya quebró 1,05 nuevamente, y se acerca al fuerte soporte de 1,0461, que fue el mínimo de marzo de 2015, y representa, desde lo técnico, un 1,382 del último movimiento alcista del cruce EUR/USD (1,0520/1,0677). Debajo de dicho nivel espera la zona de 1,0425.
El euro se muestra muy errático en estos días, en parte por la fuerza del dólar, y también por la incertidumbre política que rodea a varios países de la eurozona. El más importante es, sin dudas, el proceso electoral en Francia que puede derivar en la salida de ese país del euro en los próximos años.
La libra esterlina luce fortalecida en estas horas, aunque no logra confirmar un movimiento en esa dirección que saque al par GBP/USD de una cierta lateralización en que se encuentra. La publicación del PIB de Reino Unido, con un crecimiento mayor al esperado, salvó a la libra de perder la cota de 1,24, y se dirige ahora mismo a la zona de 1,2470, primera resistencia. Sin embargo, se encuentra lejos de 1,2510, máximo del martes, que deberá quebrar si pretende alejarse de sus mínimos semanales, y emprender un rumbo alcista más sustentable.
El yen, por su parte, se mueve en un rango de precios algo estrecho en estas horas, aunque parece preparar un nuevo ataque contra el dólar. La figura de hombro cabeza hombro que aparece en el gráfico de 4 horas puede darle fuerza a la divisa nipona durante las próximas sesiones, y llevarla a la zona de 112 sin dificultades.
Hoy, además de las actas de la Fed, aparecen las ventas minoristas en Canadá, en momentos en que el Loonie pierde algo de fuerza ante el dólar.
Mientras tanto, los índices bursátiles en Estados Unidos se muestran ajenos a cualquier duda política o económica proveniente del Gobierno de Donald Trump, y siguen batiendo récords históricos día a día. Hasta cuando, solo algunos bancos lo saben. Para adivinar sus próximas acciones, lo mejor es evaluar el volumen de operaciones; cuando este se reduzca, será el momento en que los pequeños inversores dejen de comprar, y allí vendrá el aluvión de ventas.