La última subida del oro nos ha llevado a alcanzar nuevamente la cifra de 2000 como ya ocurriera años atrás. Y es que se trata de un fundamental de gran importancia, puesto que tendremos que estar muy pendientes del comportamiento que pueda tener en los próximos días, y ser especialmente muy pacientes a la espera de comprobar si esta commodity pudiera repetir el comportamiento que ya realizase en otras ocasiones.
Recordemos que este activo, cada vez que ha alcanzado máximos históricos, ha terminado rebotando y realizando importantes caídas. Es necesario, por ello, que comprobemos si puede repetir este comportamiento, por lo que lo esencial es que no nos adelantemos a la hora de posicionarnos.
Y es que, por ahora, para que el oro nos marque indicios bajistas y podemos hablar ya de posibilidad de rebote es necesario que se consoliden mínimos por debajo del nivel soporte de 1950 en temporalidad de H4, primer indicio de que el gráfico podría estar preparado para realizar nuevas caídas.