Análisis realizado al cierre del mercado estadounidense por Kathy Lien, directora general de Estrategia FX en BK Asset Management.
En lo que respecta a la volatilidad, ha sido un día relativamente tranquilo en el mercado forex. El USD/JPY amplió pérdidas pero el billete verde se recuperó frente al euro, la libra y otras monedas importantes. Las subidas de los dólares australiano y neozelandés han sido los más fuertes, pues ambas monedas han experimentado sus mayores repuntes intradía en tres semanas frente al dólar. Aunque no se han publicado informes económicos de Estados Unidos hoy, el repunte de las acciones respaldó la estabilización de la acción de precio. Los datos comerciales de China, mejores de lo esperado, también han contribuido a la recuperación de los dólares de Australia y Nueva Zelanda.
Dicho esto, la gran historia en los mercados hoy han sido las declaraciones del presidente Trump sobre el dólar. En una serie de tuits, dijo: "como vuestro presidente, uno creería que iba a estar muy entusiasmado con el fortalecimiento de nuestro dólar. ¡No lo estoy! El elevado nivel de los tipos de interés de la Fed, en comparación con el de otros países, mantiene el dólar en niveles altos, dificultando más la competencia a nuestras grandes empresas como Caterpillar (NYSE:CAT), Boeing (NYSE:BA), John Deere (NYSE:DE), nuestras compañías automovilísticas etc. en igualdad de condiciones. Con recortes considerables por parte de la Fed (no hay inflación) y cero ajustes cuantitativos, el dólar hará posible que nuestras empresas le ganen la batalla a la competencia. Tenemos las empresas más grandes del mundo, nadie se acerca siquiera a nuestro nivel, pero lamentablemente no puede decirse lo mismo acerca de la Reserva Federal. Han tomado decisiones erróneas a cada paso del camino, y aun así seguimos a la cabeza. ¿Os imagináis lo que pasaría si realmente lo hicieran bien?"
A los inversores les preocupa que, al expresar su preferencia por un dólar más debilitado, el presidente Trump esté dando a entender que podría pedir al Tesoro que intervenga en la moneda. Esto sería similar a sus acciones de la semana pasada, cuando llamó a China manipulador de la moneda en Twitter y un día después, el Tesoro hizo oficial la etiqueta. ¿Podría el presidente Trump devaluar el dólar? Sin duda. Apenas el mes pasado dijo que "podría hacerlo en dos segundos si quisiera", pero cualquier intervención podría ser contraproducente.
Intervenir en el dólar es una mala Idea
El presidente Trump sostendrá que, mediante la devaluación del dólar, está abaratando las exportaciones estadounidenses e impulsando la valoración de los beneficios extranjeras de las empresas de Estados Unidos en términos de dólares estadounidenses.
Pero la intervención del dólar es una mala idea porque hace subir los precios, genera más volatilidad en los mercados y dificulta la tarea de la Fed. Si el objetivo principal de Trump es presionar a la Fed para que recorte más los tipos de interés, lo ha conseguido mediante la intensificación de la guerra comercial con China. Los mercados se desplomaron, el crecimiento global se ralentizará y los inversores creen que habrá dos recortes de los tipos más este año.
Si Trump devalúa el dólar, unos beneficios extranjeros más robustos podrían compensarse con una disminución de la valoración de las acciones y un debilitamiento de la demanda interna.
Además la intervención rara vez funciona si no se lleva a cabo de forma coordinada con el banco central. Si la Fed esteriliza la intervención, el impacto podría ser limitado. Si las acciones se desploman, los inversores recurrirán al refugio seguro de los dólares de todas formas.
Si la intervención está dirigida a conseguir la igualdad de condiciones con China, Estados Unidos no puede permitirse intervenir porque China tiene los bolsillos más llenos. El Gobierno chino tiene 3 billones de dólares en las reservas para impedir el debilitamiento de la moneda. La intervención de Estados Unidos por otra parte está financiada por el Fondo de Estabilización Cambiaria, que tiene un poder de compra de 100.000 millones de dólares. Trump podría asignar más fondos pero eso requeriría la aprobación del Congreso.
A juzgar por la acción del precio del dólar y el movimiento de las acciones de Estados Unidos, a los inversores no les preocupa el riesgo de una intervención. Ellos creen que hay pocas probabilidades de que ocurra ya que es peligroso y no hay precedentes, pero a Trump le gusta resistirse a lo convencional y podría encontrar formas de hacer esto posible.