El dólar presenta un comportamiento dispar ante las monedas principales el lunes, con un fuerte movimiento alcista ante la libra esterlina, en realidad una extensión del que se produjo el viernes, y una recuperación más moderada ante el yen y el euro.
Si bien este lunes no luce como el más atractivo de los días, se inicia una semana repleta de informes, que probablemente tenga efecto durante todo el mes en los precios de los pares líderes.
Así, el anuncio de política monetaria del Banco de la Reserva de Australia (RBA), previsto para el martes a primera hora, puede ser el disparador de una fuerte baja del dólar australiano si, como se cree, la entidad recorta los tipos de interés del 2,25% actual al 2%. Hubo varias señales en ese sentido en los últimos meses, si bien la última presentación del Gobernador Stevens, la semana pasada, dejó dudas sobre una medida de esta naturaleza.
En tanto, en Canadá se conocerán los datos de balanza comercial y empleo de abril. El dólar canadiense se vio ampliamente recuperado en las últimas semanas, favorecido por el alza del petróleo, y quebró incluso, momentáneamente, la cota de 1,20. Si bien ha perdido terreno en los últimos dos días, el loonie podría volver a tomar fuerza esta semana, y vulnerar dicha cota. De allí es que los informes mencionados aparecen como clave para el futuro próximo de esta divisa.
No corre la misma suerte otra moneda vinculada al petróleo, como es el peso mexicano. El peso se ubica cerca de sus mínimos de 6 años, que alcanzó en marzo pasado, en 15,66. El quiebre de este nivel extenderá sus pérdidas, buscando sin muchas dificultades la zona de 16 pesos por dólar en pocas semanas. Una figura de continuación de tendencia alcista del par USD/MXN en gráficos semanales parece avalar dicha posibilidad.
El euro, en tanto, cae ante el dólar en estas horas, aunque mantiene una tendencia alcista de corto plazo. La misma está a punto de ser vulnerada, aunque el precio deberá caer de 1,1110 y confirmar, con una apertura de vela diaria, debajo de dicho nivel para que esto suceda.
Los datos provenientes de Europa en los últimos días dan cuenta de una muy ligera recuperación de la economía de la Eurozona, y sumado a la amplia probablidad de un acuerdo entre Grecia y sus socios, el resultado es el alza de la moneda única. Aunque el verdadero disparador de este movimiento fueron las flojas cifras que la economía de Estados Unidos presentó durante todo el mes de abril.
La libra esterlina, con una baja muy fuerte el viernes, ve peligrar su tendencia alcista de corto plazo. Reino Unido afrontar unas reñidas elecciones generales esta semana, y en parte allí está la explicación para la baja de la divisa local, que había superado sin problemas 1,55 la semana pasada.
Finalmente, el dólar viene de pasar un mal mes, y el impacto de las malas noticias generó, por ejemplo, que el euro tuviera sus mejores días desde octubre de 2011, y que el yen frenara su baja. De allí es que los informes de balanza comercial, encuesta de empleos ADP, peticiones semanales de desempleo, ISM de servicios y los datos de empleo, previstos para el viernes, serán muy tomados en cuenta por los inversores en las próximas semanas.