El dólar está retrocediendo desde los máximos anotados durante la sesión europea y también desde los alcanzados ayer en horas americanas. Esta caída se está dando a una velocidad lenta, lo cual no son señales claros de que se trate de un recorrido que podría perdurar.
El cruce mantiene cierta perspectiva bajista, como ha sido el caso desde principios de mes y como se aprecia en el gráfico, se encuentre en el límite superior de una zona que está ofreciendo resistencia. Esto implica que de lograr permanecer por debajo de 0,9560 podría experimentar un mayor retroceso. La zona a romper hacia la baja en las próximas horas se localiza en 0,9500/0,9510. El quiebre de dicho nivel habilitaría un mayor retroceso para las próximas horas. Los soportes se localizan en 0,9395, 0,9465, 0,9440 y 0,9390.
Por el otro lado, de superar y consolidarse por sobre 0,9550 el dólar ganaría momento y podría extender las subas, aproximándose a 0,9600. Por encima, las resistencias se ubican en 0,9630 0,9660.