Ayer asistimos en Europa a una nueva “huida” de los inversores, entendemos que puntual, desde los activos de mayor riesgo hacia los en principio considerados como más seguros. Así, y en una sesión de escasa actividad y en la que los inversores carecieron de referencias macro de calado– sorprendió por muy positivo el comportamiento de los pedidos de fábrica alemanes en el mes de diciembre, mientras que el índice de confianza de los inversores en la zona euro, el índice que elabora Sentix, descendió en febrero ligeramente aunque superó lo esperado por los analista-, fue la política lo que centró la atención de los mercados.
El inicio de la campaña presidencial en Francia, en la que en las últimas semanas se ha producido un vuelco, quedando el candidato del centroderecha y principal favorito, Fillon, por debajo de los socialdemócratas por primera vez en años, pesaron en el ánimo de unos inversores que, por lo general, optaron por mantenerse al margen de los mercados, imponiéndose de esta forma las ventas en las bolsas europeas, lo que propició que los principales índices cerraran el día con significativos descensos.
Un día más el sector del automóvil mostró gran debilidad –es uno de los que puede resultar más afectado si finalmente la nueva Administración estadounidense aplica tarifas a los productos importados, iniciando así una “guerra comercial”-, en esta ocasión tras abrírsele a la multinacional Volkswagen (DE:VOWG_p) un nuevo frente judicial relacionado con el escándalo de las emisiones.
También se mostró débil el sector bancario, en este caso lastrado por la fuerte caída de la entidad italiana UniCredit (MI:CRDI), que ayer inicio su ampliación de capital por importe de EUR 13.000 millones. Por su parte, los valores considerados como defensivos, sanidad, utilidades, bienes de consumo básicos, fueron junto a los relacionados con las materias primas los que mejor lo hicieron durante la sesión.
Sin embargo, lo más relevante de ayer fue la importante caída que experimentaron los bonos de los países de la periferia del euro, lo que provocó un incremento significativo de sus rentabilidades y de sus primas de riesgo. Más aún teniendo en cuenta que el bono alemán se revalorizó durante la jornada ya que junto con los bonos de los países nórdicos ejerció como “activo refugio”.
Detrás de estas caídas, además de las tensiones generadas por la política europea, entendemos que estuvo la renovada preocupación de los inversores por la marcha del programa de rescate griego. Así, desde Alemania fuentes del Gobierno reiteraron que si el FMI no participa en el programa éste podría acabarse. Mientras, el FMI se reunió ayer para analizar la evolución del mismo (ver sección de Economía), sin que la institución terminara de aclarar si va o no a participar en el mencionado programa.
Por lo demás, comentar que en un día “extraño”, el dólar ejerció de refugio al igual que lo hizo el precio del oro, revalorizándose ambos activos a la vez, algo que no suele ocurrir dada la tradicional correlación inversa que mantienen.
Por último, y en lo que hace referencia a Wall Street, señalar que en este mercado la tranquilidad fue la característica predominante durante la sesión, en la que los índices pudieron consolidar los fuertes avances que experimentaron el pasado viernes, cerrando ligeramente en negativo. En este mercado fue el sector energético el que peor lo hizo, consecuencia de la caída del precio del crudo, activo que vio lastrado su comportamiento durante la sesión por la fortaleza del dólar.
Hoy, y en una sesión en la que la agenda macroeconómica vuelve a ser ligera –destaca la publicación en Alemania de la producción industrial del mes de diciembre y los empleos disponibles (JOLTS) en EE.UU. del mismo mes-, la atención de los inversores se focalizará en los resultados empresariales.
Así, destaca la publicación en Europa del banco BNP Paribas (PA:BNPP), la petrolera británica BP (LON:BP) y la compañía de infraestructuras francesa Vinci (PA:SGEF), mientras que en Wall Street darán a conocer sus cifras la principal competidora de Amadeus (MC:AMA), (AMS (SIX:AMS)), la compañía Sabre (NASDAQ:SABR), General Motors (NYSE:GM) y, tras el cierre del mercado, Walt Disney (NYSE:DIS) y la farmacéutica Gilead (NASDAQ:GILD).
Para empezar esperamos que los principales índices europeos comiencen la sesión planos o ligeramente a la baja. Habrá que estar atento a la evolución de los bonos periféricos para constatar si la “huida” hacia los activos refugios ha sido puntual, como creemos, o se consolida en Europa.