Por Kate Abnett y America Hernandez
BRUSELAS/PARÍS, 17 feb (Reuters) - Catorce empresas energéticas han instado a la Unión Europea a actuar con "cautela" en la próxima reforma del mercado de la electricidad, proponiendo ajustes limitados en lugar de cambios radicales.
La Comisión Europea está preparando reformas a las normas del mercado de la electricidad de la UE, destinadas a amortiguar las facturas de los consumidores ante las subidas de los precios de los combustibles fósiles, como las provocadas el año pasado por los cortes del suministro de gas ruso.
En una carta enviada esta semana a la Comisión, empresas como Iberdrola (BME:IBE), RWE (ETR:RWEG_p), Engie (EPA:ENGIE), Orsted, Fortum (HE:FORTUM), Enel (BIT:ENEI) y Uniper (ETR:UN01) instaron a Bruselas a centrarse en reformas que impulsen la inversión masiva en energías renovables, la generación con bajas emisiones de carbono y el ahorro energético.
"Esta reforma del mercado de la electricidad debe tratarse con cautela, ya que conlleva el riesgo de crear una fragmentación del mercado interior de la energía", afirma la carta, publicada por la empresa sueca Vattenfall, otra de las firmantes.
Las empresas respaldan la idea de la Comisión de incentivar más acuerdos de compra de electricidad y contratos por diferencia, tipos de contratos a largo plazo y precio fijo cuyo objetivo es garantizar un flujo de ingresos para los proyectos de energías renovables y ofrecer a los consumidores precios más predecibles.
Sin embargo, estas medidas deben seguir siendo voluntarias y no imponerse a los productores. Los mercados de electricidad a corto plazo podrían mejorarse, pero no deberían suprimirse, añadieron las empresas.
Su carta coincide en líneas generales con la postura de siete países de la UE, entre ellos Alemania y Dinamarca, que esta semana pidieron a Bruselas que no se precipitara a realizar grandes reformas del mercado eléctrico y se centrara en cambios limitados que pudieran incentivar las inversiones en energías verdes.
Al igual que esos países, las empresas energéticas se oponen a la idea de prorrogar las medidas de emergencia que la UE impuso el año pasado para hacer frente a la crisis energética, entre ellas un plan para recuperar los ingresos extraordinarios de las centrales eléctricas.
Las reformas también deben evitar "cualquier efecto retroactivo que pueda dar lugar a litigios importantes", añadieron las empresas.
Esto podría ponerlas en desacuerdo con España, que está a favor de una reforma más profunda del mercado y ha sugerido que se permita a los países firmar contratos por diferencia con las centrales eléctricas existentes para evitar que obtengan beneficios excesivos en los mercados eléctricos.
(Información de Kate Abnett y América Hernández; editado en español por Benjamín Mejías Valencia)