El lunes, Deutsche Bank ajustó su perspectiva sobre las acciones de PepsiCo (NASDAQ:PEP) y redujo el precio objetivo de 185 a 180 dólares, al tiempo que mantuvo la calificación de "mantener". La revisión se produce a medida que los inversores adoptan una postura más neutral a cautelosa hacia el gigante de las bebidas y los aperitivos, lo que refleja la preocupación por los resultados recientes y las perspectivas futuras.
La disminución del precio objetivo se atribuye a la lentitud de las tendencias de consumo en EE.UU. en lo que va de trimestre, especialmente en la división Frito-Lay North America (FLNA) de PepsiCo, que ha frenado las expectativas de crecimiento del volumen. Además, las recientes devaluaciones de las monedas latinoamericanas, como el peso mexicano y el real brasileño, plantean riesgos potenciales para las ganancias de la empresa, dado que podrían afectar la fortaleza del consumo en dólares constantes en estos mercados.
Deutsche Bank señaló que, si bien anteriormente había cierta flexibilidad en las previsiones de PepsiCo para todo el año, principalmente en los gastos de ventas, generales y administrativos (SG&A) previstos, ahora existe una creciente presión para que la empresa cumpla sus previsiones de crecimiento orgánico de las ventas y las ganancias por acción (EPS) para el año fiscal 2024. Las actuales condiciones del mercado podrían exigir un aumento de la productividad y medidas de contención de costes en el segundo semestre del año.
Los comentarios del analista reflejan los retos a los que se enfrenta PepsiCo para cumplir sus objetivos financieros en medio de un entorno de mercado complejo. Los factores que conducen a la revisión del precio objetivo incluyen tanto métricas de rendimiento interno como influencias económicas externas que podrían afectar a la rentabilidad de la empresa.
Los inversores y observadores del mercado seguirán de cerca los próximos resultados del segundo trimestre fiscal de PepsiCo, así como las estrategias de la empresa para contrarrestar las presiones identificadas por Deutsche Bank. El rendimiento de las acciones de la empresa ha experimentado recientemente un descenso, con una caída del 8% en comparación con la subida del 3% del S&P 500 en el último mes, lo que indica un mayor escrutinio por parte de los inversores.
En otras noticias recientes, PepsiCo ha realizado importantes movimientos en el mercado. La empresa anunció recientemente un aumento del 7% en su dividendo trimestral, lo que supone la 52ª subida anual consecutiva de dividendos. Este movimiento se alinea con las declaraciones anteriores de la empresa sobre el aumento de su dividendo anualizado a 5,42 dólares por acción desde 5,06 dólares.
En otro orden de cosas, PepsiCo ha aceptado renunciar a una cláusula de cambio de control en sus acuerdos de embotellado con Britvic, lo que podría allanar el camino para la posible adquisición del fabricante británico de refrescos por parte de Carlsberg. Esta renuncia surtirá efecto si el consejo de administración de Britvic aprueba la adquisición de Britvic por Carlsberg y ésta se lleva a cabo con éxito.
En el mundo de las inversiones, David Trone, representante en el Congreso por el distrito 6 de Maryland, vendió una parte de las acciones de PepsiCo que poseía en un fideicomiso de seguros. La transacción se valoró entre 50.001 y 100.000 dólares.
Además, Jefferies ha ajustado su perspectiva sobre las acciones de PepsiCo, aumentando el precio objetivo a 211 dólares desde los 209 dólares anteriores, al tiempo que mantiene la calificación de "Comprar". La firma anticipa que, con el enfoque de la nueva dirección en la priorización de los márgenes, los márgenes de PepsiCo North America Beverages podrían empezar a experimentar un giro positivo.
Opiniones de InvestingPro
A pesar de la postura cautelosa de Deutsche Bank, los inversionistas a largo plazo de PepsiCo podrían encontrar consuelo en el fuerte compromiso histórico de la empresa con los rendimientos para los accionistas. Según los consejos de InvestingPro, PepsiCo no sólo ha aumentado su dividendo durante 51 años consecutivos, sino que también ha mantenido el pago de dividendos durante 54 años consecutivos. Esta consistencia refleja la sólida salud financiera de la empresa y su capacidad para generar flujos de efectivo que puedan cubrir suficientemente los pagos de intereses. Además, con un margen de beneficio bruto de más del 54% en los últimos doce meses a partir del primer trimestre de 2024, PepsiCo demuestra una rentabilidad impresionante en el sector de las bebidas.
Desde el punto de vista de la valoración, el PER de PepsiCo se sitúa en 25,03, con un PER ajustado de 22,73 para los últimos doce meses hasta el primer trimestre de 2024, lo que indica una posición de negociación con un PER más bajo en relación con el crecimiento de los beneficios a corto plazo. Además, el ratio PEG, una métrica que relaciona el PER con la tasa de crecimiento de los beneficios de la empresa, se sitúa en un favorable 0,63, lo que sugiere que la acción puede estar infravalorada en función de su trayectoria de beneficios.
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