El viernes, KGI Securities rebajó las acciones de Nike (NYSE:NKE) de Outperform a Neutral, ajustando el precio objetivo a 86,00 dólares desde una cifra previamente superior. Esta acción siguió al anuncio de Nike de sus resultados del cuarto trimestre del año fiscal 2024 (marzo-mayo), que no cumplieron las expectativas. Además, la empresa pronosticó un descenso de las ventas en el año fiscal 2025.
Los débiles resultados de Nike y la consiguiente rebaja de la calificación se atribuyen a un descenso de la demanda en Norteamérica y Europa. Además, la empresa se enfrenta a retos macroeconómicos en la Gran China. La combinación de estos factores ha provocado una importante caída del 12% en el valor de las acciones de Nike en las operaciones posteriores al cierre del 27 de junio.
Las perspectivas de Nike se ensombrecen aún más por el retraso en el lanzamiento de nuevos productos, que no se espera que lleguen al mercado hasta la primavera de 2025. Estos productos se consideran cruciales para que la empresa recupere la cuota de mercado perdida. Sin embargo, con el aumento de la competencia en el mercado, preocupa el impacto en la valoración de Nike y en su cadena de suministro a lo largo de la segunda mitad del año fiscal 2024.
KGI Securities destacó estos retos en su análisis, señalando que los nuevos productos previstos se consideraban un punto de inflexión potencial para las pérdidas de cuota de mercado de Nike. Con el retraso de su lanzamiento y el aumento de la competencia en el mercado, se espera que aumenten las presiones sobre la valoración de las acciones de la empresa en los próximos meses.
Los inversores reaccionaron a la noticia y a la rebaja de la calificación, como se reflejó en la sesión bursátil posterior al cierre. La evolución de las acciones de Nike seguirá siendo objeto de un estrecho seguimiento mientras la empresa sortea estos vientos en contra y se prepara para el lanzamiento de sus futuros productos.
En otras noticias recientes, Nike ha sido objeto de varios ajustes por parte de las firmas de analistas tras su último informe de resultados y su previsión financiera actualizada para el ejercicio fiscal 2025. Los beneficios por acción de Nike en el cuarto trimestre, de 1,01 dólares, superaron las expectativas, pero sus ingresos, de 12.600 millones de dólares, se quedaron ligeramente por debajo de los 12.800 millones previstos.
CFRA subió el precio objetivo de Nike y mantuvo la calificación de "mantener", mientras que BMO Capital, TD Cowen y Williams Trading bajaron sus precios objetivo pero mantuvieron sus respectivas calificaciones de "superar", "mantener" y "vender". JPMorgan rebajó la calificación de Nike de Sobreponderar a Neutral y también redujo su precio objetivo.
Las firmas de análisis han expresado su preocupación por el futuro crecimiento de Nike y el panorama competitivo, con TD Cowen destacando el aumento de la competencia y Williams Trading señalando una demanda más débil y retrocesos estratégicos.
A pesar de estas preocupaciones, la CFRA reconoció la solidez del balance de Nike y el atractivo duradero de su marca en todo el mundo. Las previsiones financieras revisadas de Nike para el ejercicio fiscal 2025 anticipan un descenso de los ingresos para el primer trimestre, el primer semestre y el año completo, pero se espera un repunte en sus categorías Lifestyle durante el segundo semestre del ejercicio.
Estos últimos acontecimientos han tenido un impacto en otros actores del mercado de ropa y calzado deportivo, como JD Sports, Puma y Adidas. Los analistas de Kepler Cheuvreux sugieren que la estrategia comercial ajustada de Nike podría crear una oportunidad para que Adidas amplíe su cuota de mercado. A pesar de los retos a los que se enfrenta, Nike mantiene su compromiso con la innovación y las iniciativas estratégicas para el crecimiento futuro.
Perspectivas de InvestingPro
Mientras Nike se enfrenta a los retos descritos en la rebaja de KGI Securities, la salud financiera de la empresa y su posición en el mercado siguen siendo fundamentales para los inversores. Según datos en tiempo real de InvestingPro, la capitalización bursátil de Nike se sitúa en 114.920 millones de dólares, con un ratio Precio/Beneficios (PER) de 20,39. Estas cifras sugieren que se trata de una empresa de tamaño considerable.
Estas cifras sugieren una empresa de tamaño considerable y una valoración que refleja las expectativas de los inversores sobre el crecimiento futuro de los beneficios. A pesar de un discreto crecimiento de los ingresos del 1,89% en los últimos doce meses hasta el primer trimestre de 2024, Nike mantiene un sólido margen de beneficio bruto del 44,3%, lo que indica un eficiente control de costes y un sólido modelo de negocio.
Desde el punto de vista de la inversión, cabe destacar la sólida trayectoria de Nike en el pago de dividendos. Según los consejos de InvestingPro, la empresa ha aumentado su dividendo durante 22 años consecutivos y ha mantenido el pago de dividendos durante 41 años consecutivos. Esta consistencia puede atraer a los inversores centrados en los ingresos, especialmente en tiempos de incertidumbre en el mercado. Además, las acciones de Nike cotizan cerca de su mínimo de 52 semanas, lo que podría representar un punto de entrada potencial para los accionistas que buscan valor.
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