Por Stanley White
TOKIO (Reuters) - Las expectativas inflacionarias a largo plazo de las compañías japonesas se debilitaron en septiembre, mostró un sondeo del Banco de Japón, subrayando las difícil y extensa tarea que enfrenta el banco central para intentar vencer la mentalidad deflacionaria del país.
El sondeo muestra lo complejo que será impulsar la inflación, incluso después de que el BOJ modificó su marco de política monetaria en septiembre después de que más de tres años de compras de enormes cantidades de deuda no lograron impulsar un alza de los precios.
"El BOJ ya ha reconocido las débiles expectativas inflacionarias, así que no espero que adopte una política más expansiva en su próxima reunión", dijo Shuji Tonouchi, economista senior de Mitsubishi UFJ (T:8306) Morgan Stanley (NYSE:MS) Securities.
"Yo espero que el BOJ recorte sus estimaciones del IPC. El BOJ dice que los riesgos bajistas vienen desde el extranjero. Hasta el momento, esos riesgos no han aumentado", agregó.
Las compañías esperan que los precios al consumidor suban de media un 0,6 por ciento al año a partir de ahora, por debajo de la proyección realizada hace tres meses, mostró el martes el sondeo del banco central.
Hace tres meses, las compañías esperaban que los precios subieran un 0,7 por ciento al año.
Las empresas consultadas por el BOJ, como parte de su sondeo "tankan" detallado de septiembre, también dijeron que esperan que los precios al consumidor crezcan un 1,0 por ciento anual en unos tres años y un 1,0 por ciento anual en cinco años.
El BOJ comenzó el sondeo sobre previsiones de precios de las empresas desde el tankan de marzo de 2014, para reunir más información sobre las expectativas inflacionarias, que son clave para su actual programa de estímulo.