Fráncfort (Alemania), 4 mar (.).- El Banco de Pagos Internacionales (BPI (ELI:BBPI)) considera que los mercados han pasado de anticipar una rápida y drástica bajada de los tipos de interés a abogar por un aterrizaje suave tras los mensajes de los bancos centrales.
El BPI, cuya sede está en la ciudad suiza de Basilea, ha publicado este lunes su informe trimestral de marzo, en el que analiza los movimientos en los mercados financieros desde el 25 de noviembre de 2023 al 26 de febrero de 2024.
Según el informe, hasta finales de diciembre las condiciones financieras siguieron suavizándose, en línea con los meses anteriores, debido a que los mercados descontaban una rápida bajada de los tipos de interés.
En este contexto, los rendimientos de los bonos soberanos bajaron, mientras que las valoraciones de los activos de riesgo subieron, al tiempo que las economías emergentes experimentaron flujos de entrada de bonos y los mercados bursátiles, a excepción de China, ampliaron sus ganancias.
Sin embargo, a partir de enero la situación cambió debido a que los miembros de los bancos centrales comenzaron a lanzar mensajes con el objetivo de disipar el optimismo, al confirmar que mantendrían los tipos en los niveles actuales el tiempo suficiente hasta asegurar que ganaban la batalla a la inflación.
Cabe recordar que el Banco Central Europeo (BCE) subió los tipos de interés hasta el 4,5 % en septiembre y, desde entonces, los ha mantenido en tres ocasiones consecutivas en los mismos niveles, al tiempo que la presidenta de la institución, Christine Lagarde, ha insistido recordar que sus decisiones dependerán de los datos.
Por su parte, la Reserva Federal (Fed) mantiene desde el pasado julio los tipos en el 5,25-5,5 %, su máximo en 23 años, y también ha alejado por el momento la posibilidad de rápidas bajadas.
En especial, desde el BPI apuntan a la publicación de su decisión de política monetaria del pasado enero, cuando subrayaron su decisión, lo que hizo que la distancia entre sus expectativas y las de los bancos centrales se redujera, según ha apuntado el jefe de investigación del organismo, Hyun Song Shin.
"Los esfuerzos de los bancos centrales para alinear las expectativas del mercado acabaron por dar resultado", ha explicado durante la presentación del informe.
Volatilidad en los mercados de deuda pública
En este contexto, la volatilidad de los mercados de deuda pública se mantuvo "históricamente alta" durante este periodo, ya que siguieron bajando en diciembre, para posteriormente volver a subir en enero.
Con respecto a los activos de riesgo, los índices bursátiles subieron y los diferenciales de riesgo se estrecharon, al tiempo que las condiciones financieras se relajaron, lo que refleja, según la institución, las expectativas de un aterrizaje suave.
La única excepción fue China, en donde la economía continuó sufriendo tensiones debido al sector inmobiliario.
Además, el optimismo en las condiciones financieras contrastó con la cautela de los bancos a la hora de conceder préstamos, la escasa emisión de bonos y el aumento de la morosidad empresarial.
Por su parte, el mercado de divisas también envió señales contradictorias, ya que el dólar primero se depreció para revertir la situación a partir de enero debido a los mensajes que alejaban una rápida bajada de tipos.