LONDRES, 23 ago (Reuters) - La desaceleración de la actividad empresarial en la zona euro se ha acentuado mucho más de lo previsto este mes, con una caída generalizada en toda la región, especialmente en Alemania, la mayor economía europea, según un sondeo.
En el sector de los servicios, dominante en el bloque, la actividad cayó en picado y, aunque continuó la contracción de la producción manufacturera, se observaron algunos signos de recuperación.
El Índice Compuesto de Gestores de Compras (PMI) de HCOB para el bloque, elaborado por S&P Global y considerado un buen barómetro de la salud económica general, cayó a 47,0 en agosto desde los 48,6 de julio, su nivel más bajo desde noviembre de 2020.
Esta cifra se situó muy por debajo de la marca de 50 que separa el crecimiento de la contracción y fue inferior a todas las expectativas de una encuesta de Reuters, que había pronosticado un ligero descenso a 48,5.
Una parte de esta actividad se debió a la finalización por parte de las empresas de antiguos pedidos. El índice de cartera de pedidos cayó a 45,2 desde 46,0, su nivel más bajo desde junio de 2020, cuando la pandemia del COVID estaba cimentando su dominio en el mundo.
El PMI de servicios se hundió a 48,3 desde 50,9, su primera vez por debajo de la marca de equilibrio este año, ya que los consumidores endeudados que sienten el pellizco de los crecientes costes de los préstamos frenaron el gasto. La encuesta de Reuters había previsto una lectura de 50,5.
"Lamentablemente, el sector servicios de la zona euro muestra indicios a la baja con resultados similarmente débiles a los del sector manufacturero", dijo Cyrus de la Rubia, economista jefe del Hamburg Commercial Bank.
"De hecho, las firmas del sector servicios indicaron una reducción de la actividad empresarial por primera vez desde fines de 2022, mientras que la producción manufacturera volvió a disminuir", añadió.
La demanda cayó bruscamente, ya que el aumento de los precios, mucho más rápido de lo que el Banco Central Europeo desearía, ahuyentó a los clientes. El índice de precios de producción de los servicios se mantuvo elevado en 55,9, aunque el resultado fue el más bajo desde octubre de 2021 y estuvo por debajo del 56,1 de julio.
El BCE emprendió su política monetaria de endurecimiento más agresiva en julio de 2022, pero hará una pausa en septiembre, según una estrecha mayoría de economistas encuestados por Reuters, aunque una nueva subida de los tipos de interés a finales de año sigue estando sobre la mesa con la inflación al rojo vivo.
La inflación fue del 5,3% en julio, según los datos oficiales, más del doble del objetivo del 2% fijado por el BCE, pero muy por debajo de los niveles registrados a finales del año pasado.
La actividad manufacturera lleva en declive desde mediados de 2022, pero la última encuesta del PMI ofrece alguna esperanza de que se haya superado el punto más bajo. El índice general subió a 43,7 desde 42,7, su primera subida en siete meses, superando las expectativas del sondeo de Reuters de una caída a 42,6.
El índice que mide la producción, que alimenta el PMI compuesto, subió a 43,7 desde 42,7.
"¿Puede vislumbrarse un fondo para la caída del sector manufacturero? Quizás sí, puesto que el índice PMI, que sigue en territorio de contracción, ha registrado un cierto repunte. Esto ocurrió gracias a una situación ligeramente mejor de los pedidos además de una reducción más lenta de las existencias", dijo De la Rubia.
El optimismo de los directores de compras de las fábricas mejoró, lo que también sugiere que lo peor puede haber pasado para los fabricantes, ya que el índice de producción futura subió desde 52,8 a 53,5.
(Reporte de Jonathan Cable; Edición de Hugh Lawson (TYO:2651); Editado en español por Flora Gómez)