Quito, 3 jun (EFE).- El presidente ecuatoriano, Lenín Moreno, situó este miércoles a la economía nacional entre "la vida y la muerte" y anunció que mantendrá como aliados a los organismos multilaterales y al endeudamiento como salvavidas para encarar la crisis que sufre el país.
Moreno, en un mensaje de radio y televisión, pidió también al Legislativo un "respiro político" y que se disipe la amenaza de un proceso de censura contra el ministro de Economía, Richard Martínez, al que la oposición acusa de haber privilegiado el pago de la deuda externa y desatendido la salud durante la pandemia del coronavirus.
"Nuestra economía (...) es frágil y se debate entre la vida y la muerte y no podemos ponerla en mayor riesgo", reclamó Moreno quien ya ha aplicado en el pasado medidas de ajuste, rechazadas por sectores sociales y políticos con fuertes protestas.
El mandatario anunció que para el semestre que viene deberá renegociar la deuda externa con los acreedores privados (poseedores de bonos del Estado), además de "conseguir un nuevo acuerdo con los organismos multilaterales", como el Fondo Monetario Internacional.
Justamente, Ecuador mantiene un acuerdo con el FMI por 4.200 millones de dólares (3.744 millones de euros), que avala préstamos de multilaterales como el Banco Mundial, el BID y la CAF (MC:CAF), por otros 6.000 millones ( 5.342 millones de euros).
Asimismo, el Gobierno de Ecuador ha negociado créditos de emergencia con el FMI y otros organismos internacionales para atender la pandemia del COVID-19.
Moreno añadió que su estrategia incluye también obtener "nuevas y mejores fuentes" de financiación de gobiernos como el de China, con el objetivo de "traer la mayor cantidad de dinero" a la "debilitada economía" nacional.
Ello con el objetivo de atender la "salud, alimentación, empleo y la dolarización" de la economía, los cuatro ejes que se ha fijado para el próximo año, el último de su mandato que empezó en mayo de 2017.
El gobernante dijo que, además, ha conformado un "consejo asesor" con economistas reconocidos, que acompañarán "las decisiones fundamentales que habrá que tomar" desde el Ejecutivo.
Mencionó que de manera inicial dicho consejo estará integrado por un exgerente del Banco Central e integrante del equipo del FMI Augusto de la Torre, el exministro Fausto Ortiz y el académico Pablo Lucio Paredes.
Todos ellos comandados por el ministro Martínez, a quien definió como la "contraparte fundamental para conseguir" los créditos en el exterior.
Por ello, pidió que se suspendan las amenazas de un proceso de censura contra Martínez, debido a que la economía nacional, "más que nunca necesita ahora estabilidad".
"Les parece momento para la pirotecnia" política, preguntó Moreno a los legisladores de oposición, a quienes demandó un "respiro político" para que los expertos consigan los recursos que necesita el país y así afrontar, según dijo, "la más grande crisis de su historia".