La Paz, 18 abr (.).- Los productores bolivianos de fibra de vicuña cerraron la venta de 2.175 kilos de esa lana valorada en más de 854.000 dólares a la empresa italiana Loro Piana, informó a EFE este jueves el presidente de la Asociación Comunitaria para la Comercialización de la Fibra de Vicuña de Bolivia (ACOFIVB), Oscar Alejo.
La transacción se efectuó por una "invitación internacional" en la que se presentaron nueve propuestas, incluidas las de algunas empresas bolivianas, que se sometieron a la calificación de las comunidades productoras que valoraron el precio y la cantidad de fibra para comprar, explicó.
"La calificación ha sido ganada por Loro Piana (...) ha ofrecido 393 dólares por el kilo de la fibra de vicuña, y (la compra de) todo el stock", indicó el presidente de ACOFIVB.
Alejo mencionó que en la convocatoria había propuestas bolivianas que ofrecieron más dinero por kilo, pero ninguno ofreció comprar una cantidad "considerable".
"Querían comprar 10 kilos, 20 kilos, otro quería comprar hasta 200 kilos ¿Pero la otra fibra qué se va hacer? Eso era preocupante para nosotros", añadió.
El dirigente explicó que este año las asociaciones de productores optaron por vender toda su producción a una sola empresa, luego de que el año pasado, cuando se vendieron algunas cantidades de fibra de vicuña a algunos artesanos y empresas locales, hubo "dificultades" con el pago.
También mencionó que con esta venta resultaron beneficiadas más de 150 comunidades productoras de la fibra del camélido altiplánico en Potosí, Oruro, La Paz y parte de Tarija, en las que hay unas 145.000 vicuñas.
Alejo señaló que además, la firma italiana ofreció ocho máquinas esquiladoras para que las poblaciones mejoren su técnica en las fases de producción de fibra.
"Necesitamos maquinaria para industrializar en Bolivia. Antes vendíamos en bruto, pero ahora estamos queriendo llegar al hilado", afirmó.
Por su parte, algunas empresas bolivianas emitieron hace unos días un comunicado en el que acusan a la empresa italiana Loro Piana de "monopolizar" el mercado de fibra de vicuña además de provocar el descenso del precio internacional del producto que se cotiza por sobre los 400 dólares por kilo.
También cuestionaron que esa venta se haya realizado bajo la modalidad de "factura de exportación" por lo que está exenta de tributos y que la firma italiana no genera empleos en Bolivia, puesto que no tiene oficinas en el país.
Los emprendedores bolivianos también señalaron que este tipo de transacciones que hacen los productores va en contra de los negocios artesanales locales, los cuales se ven obligados a acceder al "mercado negro" de fibra para sus confecciones.
En los mercados de Europa o Estados Unidos, una prenda de fibra de vicuña está tasada por sobre los 9.000 dólares.