MADRID (Reuters) - El Gobierno español ha planteado a los representantes de los funcionarios una subida salarial del 7,25 por ciento en los próximos tres años, en unas negociaciones en las que por ahora no hay acuerdo ante el rechazo de los sindicatos a la oferta.
En la reunión que ha mantenido con los sindicatos, el Ministerio de Hacienda ha ofrecido una fórmula con un componente fijo del 5,25 por ciento para 2018-2020 -equivalente al IPC esperado para el periodo-, más un porcentaje variable que elevaría la subida al 6,50 por ciento si se cumplen los objetivos del PIB español, o el 7,25 por ciento en caso de que se superen en medio punto porcentual.
"Esta propuesta supone una gran decepción, pedimos empezar a recuperar el poder adquisitivo perdido (por los funcionarios), que estimamos en hasta el 20 por ciento desde 2009", dijo una fuente sindical, que apuntó a la posibilidad de que se convoquen movilizaciones en caso de no alcanzar un acuerdo.
Tras un recorte del 5 por ciento en 2010 y una congelación salarial en los cinco años siguientes, el Gobierno decidió aplicar en 2016 y 2017 subidas del 1 por ciento en los salarios de los empleados de las Administraciones Públicas, uno de los colectivos más castigados por los recortes de gasto público durante la crisis.
"Esta oferta va a dificultar la tramitación de los presupuestos al Gobierno", dijo el martes la fuente, que señaló que habrá nuevas reuniones para tratar de consensuar la subida el miércoles y el jueves.
Con o sin pacto con los sindicatos, el alza en la remuneración de los funcionarios formará parte del proyecto de Presupuestos Generales del Estado de 2018 que el Ejecutivo de Mariano Rajoy presentará en el Consejo de Ministros del viernes, y que tendrá que negociar con otros grupos políticos al no tener mayoría absoluta en el Congreso.
Como punto de partida, la propuesta de Hacienda incluye un incremento fijo del 1,5 por ciento en 2018, más una parte variable del 0,25 por ciento si se cumple el objetivo de crecimiento de la economía. Este componente variable sería del 0,5 por ciento si se supera la meta del PIB en medio punto porcentual.
Para 2019, la parte fija sería del 1,75 por ciento y la variable con cumplimiento del PIB del 0,50 por ciento, mientras que para 2020 los incrementos serían del 2 por ciento fijo y del 0,5 por ciento variable. En estos dos ejercicios, la parte variable subiría al 0,75 por ciento en caso de superarse el PIB en medio punto, según la fuente.
Como parte de las conversaciones también se están abordando otra serie de cuestiones como una mejora en la oferta de empleo público, una tasa de reposición —las sustituciones de bajas en la plantilla— del 100 por cien en la mayoría de ámbitos de la administración, la posibilidad de consolidar empleo para interinos y la mejora de las condiciones en las bajas por incapacidad temporal.
(Información de Tomás Cobos; editado por Andrés González)