Nueva Delhi, 27 dic (.).- Partidos opositores indios advirtieron hoy de la falta de mejoras en la crisis de liquidez que sufre el país desde la retirada de los billetes de mayor denominación, a punto de cumplirse el plazo de 50 días que el Gobierno estableció para solucionar la situación.
En una rueda de prensa conjunta de ocho formaciones opositoras, el vicepresidente del Partido del Congreso, Rahul Gandhi, aseveró que desde la eliminación de los billetes el pasado noviembre el desempleo se ha disparado y agricultores y pequeños comerciantes carecen de efectivo.
Según el heredero de la dinastía Nehru-Gandhi, además la medida no ha tenido "ningún impacto en la corrupción", su principal objetivo, ya que trajo consigo un nuevo "mercado negro" para lavar el dinero que quedó obsoleto.
La jefa del Gobierno de Bengala (este), Mamata Banerjee, pidió al primer ministro indio, Narendra Modi, que dimita si la situación no mejora antes del viernes, cuando se cumplen 50 días de la implementación de la medida y caduca el plazo que el dirigente pidió a la población para solucionar la crisis.
El 8 de noviembre, sin previo aviso y por la noche, el primer ministro hacía una inusual intervención televisiva transmitida a todo el país en la que informaba de que los dos billetes de mayor denominación, los de 500 y 1.000 rupias (6,7 y 13,4 euros, respectivamente), salían de circulación con efecto casi inmediato.
Desde entonces, bancos y cajeros automáticos registran permanentemente largas colas y el Ejecutivo ha implementado sobre la marcha y sin mucho resultado diversas medidas para lidiar con la falta generalizada.
A pesar de ello, Modi insistió hoy en defender la medida durante un mitin en el estado norteño de Uttrakhand.
"De un sólo golpe, se resolvieron (los problemas de) los billetes falsos, el terrorismo, tráfico de personas y mafias de drogas tras el anuncio de la 'desmonetización' el 8 de noviembre", afirmó el dirigente.