Por Karen Brettell
NUEVA YORK, 7 nov (Reuters) -El dólar subió el martes, ya que la liquidación de la semana pasada se consideró exagerada a corto plazo, mientras que el euro se vio afectado por débiles datos alemanes.
* En tanto, el dólar australiano retrocedió después de que el banco central de ese país elevara las tasas de interés, dando a entender que el alza sería el último del actual ciclo de endurecimiento.
* El billete verde cayó la semana pasada, después de que el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, adoptara un tono más cauto de lo esperado al término de la reunión de política monetaria del banco central estadounidense el miércoles, cuando mantuvo las tasas sin cambios.
* El informe de empleo estadounidense del viernes, más suave de lo esperado, contribuyó a la debilidad del dólar.
* "Este rebote del dólar de ayer y hoy es en realidad una corrección de lo que ocurrió la semana pasada, que yo diría que fue un doble golpe entre la Fed y los datos de empleo", dijo Marc Chandler, de Bannockburn Global Forex en Nueva York.
* La ralentización de la economía estadounidense podría debilitar aún más al dólar.
* Christopher Waller y Michelle Bowman, funcionarios de la Fed, destacaron el martes el "extraordinario" crecimiento del tercer trimestre, con una tasa anualizada del 4,9%.
* El índice dólar, que compara al billete verde con una cesta de seis destacadas divisas, ganó un 0,37%, a 105,52 unidades. La semana pasada perdió un 1,4%, su mayor descenso semanal desde mediados de julio.
* El euro cayó un 0.20%, a 1.0695 dólares, tras conocerse un desplome de la producción industrial alemana en septiembre mayor de lo esperado.
* El dólar australiano retrocedió un 0,88%, a 0,6431 dólares, en su mayor declive porcentual diario en un mes, después de que el Banco de la Reserva de Australia aumentara las tasas en 25 puntos básicos para combatir la persistente inflación, precisando que es poco probable un mayor endurecimiento.
* La divisa estadounidense avanzó un 0,25%, a 150,43 yenes, situándose de nuevo por encima del nivel de 150 unidades que ha mantenido en vilo a los operadores en las últimas semanas, a la espera de señales de intervención por parte de Tokio.
(Reporte adicional de Alun John en Londres y Ankur Banerjee en Singapur; editado en español por Carlos Serrano y Sofía Díaz Pineda)