Roma, 21 nov (.).- Las acciones del banco Monte dei Paschi di Siena (BIT:BMPS) (MPS), el más antiguo del mundo en funcionamiento, perdieron el 7,94 % de su valor en la Bolsa de Milán horas después de que el Estado italiano vendiera el 25 % del capital de la entidad, nacionalizada en 2017 para salvarla de la quiebra.
Mediante un proceso acelerado de cobro de órdenes, el Ejecutivo italiano puso en el mercado unos 315 millones de acciones que se vendieron a un precio de 2,92 euros cada una, informó el Ministerio de Economías y Finanzas (MEF) italiano.
Tras esta operación el Estado italiano sigue siendo titular del 40 % del capital de Monte dei Paschi.
En un primer momento la oferta de venta iba a ser del 20 % del capital, pero se incrementó al 25 % debido a que "la demanda recibida superaba en más de 5 veces el importe inicial".
Sin embargo, la operación no convenció a los mercados, que llevaron a MPS a liderar las caídas en el parqué milanés hasta alcanzar un precio por acción de 2,8 euros al cierre de la cotización.
El pasado mes de octubre, el ministerio ya inició los trámites para vender sus acciones al comunicar un proceso de identificación de "los mejores métodos para desinvertir su participación", que con el proceso de hoy ya se ha reducido al 40 %.
El Ejecutivo avanzó entonces que contemplaba múltiples escenarios para esa venta, que podría ser en una o más operaciones, dirigidas "al público de ahorradores en Italia, incluidos los empleados del banco, inversores institucionales italianos e internacionales, o a una negociación directa".
Tampoco se descartaba una operación de integración con otra entidad italiana, admitió el ministerio.
Las acciones del MPS habían subido hasta el 20 % en el último mes tras presentar unos resultados positivos, al ganar 928,6 millones de euros en los primeros nueve meses del año, frente a las pérdidas de 334,4 millones registradas en el mismo periodo de 2022.
MPS, fundado en 1472, está controlado por el Estado italiano desde que en 2017 aprobara su recapitalización cautelar, autorizada por Bruselas, para salvarlo de la quiebra.
Antes, en 2013 el Estado tuvo que aprobar un rescate por valor de casi 4.000 millones de euros después de que se descubrieran pérdidas millonarias no reveladas que databan de épocas anteriores.
El año pasado, el Banco Central Europeo (BCE) aprobó una petición de aumento de capital por valor de 2.500 millones de euros que estaba incluido en su plan estratégico para 2022-2026 llamado a relanzar la entidad tras los problemas económicos sufridos.