Madrid, 13 dic (.).- La consejera delegada de la compañía de energía Engie (EPA:ENGIE) en España, Loreto Ordóñez, ha dicho este miércoles que tienen la esperanza de que el impuesto extraordinario a las energéticas sea "puntual" y 2024 sea su último año de vigencia, fundamentalmente porque necesitan invertir en renovables.
Ordóñez, que ha intervenido en un encuentro empresarial organizado por la CEOE, ha dicho que, por las últimas informaciones que llegan, parece que la continuidad del impuesto está en discusión y ha añadido que, al considerarse un impuesto extraordinario, no puede ser estructural.
Ha expresado su esperanza en que el gravamen esté sólo vigente para el ejercicio que resta de aplicación, 2024, y ha subrayado que las inversiones de las compañías en renovables tienen un rendimiento más allá de los 3.000 millones euros anuales de recaudación.
La consejera delegada de Engie ha dicho que una de las necesidades que hay en la actualidad es definir las reglas del juego que se aplican en situaciones excepcionales para evitar asimetrías, y ha recordado, en este sentido, los impuestos establecidos en Italia y España.
Ordóñez ha indicado que es verdad que esos impuestos desincentivan la inversión, pero aún más lo hacen "la volatilidad y la falta de previsión", que haya impuestos que hoy aparecen y mañana desaparecen.
Por su parte, el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, que ha clausurado el encuentro, ha dicho que con esos "impuestos abusivos", como ha definido al impuesto extraordinario a las energéticas, se detraen a las empresas 1.500 millones que se dejan de invertir en hacer 15.000 megavatios (MW) cada año en España.
Garamendi ha añadido que tiene que haber un marco estable y que "las empresas tienen que ganar dinero" y que él lo dice con claridad, pues de que ellas ganen dinero depende la consolidación del futuro del país.